La nacionalización de YPF
Hace 20 años nací en San Juan, Argentina. Sí, soy argentino y, créanme, no estoy orgulloso de la nacionalización de YPF.
No me gusta ver a mis compatriotas celebrar como si hubiésemos vuelto a ganar el Mundial del 86 o como si hubiésemos ganado la Guerra por las Malvinas.
Es un gran error del Gobierno argentino, no por las posibles sanciones sino porque Argentina no podrá financiar la extracción y explotación del petróleo, de eso se encargaba Repsol.
Aún queda más y, en mi opinión, lo peor: ¿saben qué es lo que va a ocurrir cuando el Gobierno argentino se dé cuenta que no ...
Hace 20 años nací en San Juan, Argentina. Sí, soy argentino y, créanme, no estoy orgulloso de la nacionalización de YPF.
No me gusta ver a mis compatriotas celebrar como si hubiésemos vuelto a ganar el Mundial del 86 o como si hubiésemos ganado la Guerra por las Malvinas.
Es un gran error del Gobierno argentino, no por las posibles sanciones sino porque Argentina no podrá financiar la extracción y explotación del petróleo, de eso se encargaba Repsol.
Aún queda más y, en mi opinión, lo peor: ¿saben qué es lo que va a ocurrir cuando el Gobierno argentino se dé cuenta que no tienen capacidad suficiente para autofinanciarse? Pocos, o mejor dicho, muy pocos países acudirán en su ayuda. Cuando llegue ese día todos los argentinos que hoy celebran la nacionalización de YPF desearán que no hubiera ocurrido nunca.— Matías Rosel.