Naturgy ganó 1.214 millones en 2021, frente a las pérdidas de 347 millones de un año antes
La empresa disparó sus ingresos un 44% en plena escalada de precios de la energía y redujo su deuda en un 6%
2021 fue un buen año para la energética española Naturgy, que se apuntó un beneficio de 1.214 millones de euros frente a las pérdidas de 347 millones cosechadas el ejercicio anterior. Con los precios de la luz por las nubes, en máximos históricos, y la demanda energética regresando poco a poco a los niveles prepandemia, la antigua Gas Natural Fenosa logró un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 3.9...
2021 fue un buen año para la energética española Naturgy, que se apuntó un beneficio de 1.214 millones de euros frente a las pérdidas de 347 millones cosechadas el ejercicio anterior. Con los precios de la luz por las nubes, en máximos históricos, y la demanda energética regresando poco a poco a los niveles prepandemia, la antigua Gas Natural Fenosa logró un beneficio bruto de explotación (ebitda) de 3.983 millones de euros, un 7% más que en 2020. La deuda neta, por su parte, bajó casi un 6% hasta los 12.831 millones, en gran medida por la venta de la filial de redes eléctricas en Chile y los cobros en efectivo derivados del acuerdo que puso fin al conflicto de su planta de gas en Egipto, según la información remitida este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Pese a superar previsiones de ingresos y beneficios, las acciones de la energética cerraron la sesión con una caída del 1,2%.
En plena escalada de los precios de la electricidad y del gas, la facturación de Naturgy se disparó en 2021 hasta los 22.130 millones de euros, un 44,2% más que en 2020, “con un impacto especialmente positivo en las actividades de gestión de energía”, tal y como reconoce la empresa en la nota remitida al regulador. En el caso del ebitda, la mayor contribución provino también de la línea de gestión de energía y las redes —una división muy favorecida por el inédito despegue de los precios—, que dejó 3.266 millones el año pasado, un 14,2% más. Las renovables, por su parte, aportaron 488 millones, casi un 39% más que un año antes. Y solo se vio perjudicada la actividad de comercialización, que restó 96 millones frente a los 326 millones en positivo del ejercicio anterior.
Mención especial merecen algunas líneas de negocio que se vieron especialmente favorecidos por el escenario de altos precios de la energía. La división de gas natural licuado (GNL) disparó su Ebitda ordinario un 80,3%, hasta los 357 millones: “El escenario de precios elevados y la gestión para optimizar nuestra cartera, ha permitido mayores márgenes durante la segunda mitad del año”, admite la empresa. También fue viento en popa la generación térmica en España —básicamente, los ciclos combinados que queman gas para obtener electricidad—, que aportó 111 millones de euros al beneficio bruto de explotación, un 50% más que un año antes, “debido fundamentalmente a los altos precios de la electricidad”.
Naturgy pone especial énfasis en que los costes de reestructuración ligados al plan de salidas voluntarias de empleados en España —que el año pasado tuvieron un impacto de 291 millones sobre el beneficio neto— y los costes de desistimiento por contratos onerosos de ventas de gas en el último trimestre del año, se han visto “compensados casi en su totalidad por las plusvalías netas por la venta de su filial chilena (CGE Chile), que le ha reportado 2.570 millones, el pacto alcanzado en Egipto y la reversión de la provisión del canon hidráulico 2013-2020 durante el último trimestre de 2021.
Las inversiones acometidas por Naturgy se elevaron el año pasado hasta los 1.484 millones, un 16% más, en gran medida por la apuesta por los proyectos de energías renovables en España, Estados Unidos y Australia, y por los “esfuerzos comerciales y de digitalización”. Y el dividendo total fue de 1,33 euros por acción, mientras que para este año el consejo de administración propondrá retribuir a sus accionistas con 1,2 euros por título. 2021 fue un año especialmente convulso en el accionariado de la energética, con un intento de opa no solicitada del fondo australiano IFM que no logró su objetivo. Sin embargo, el vehículo inversor ha seguido elevando su participación en el capital hasta el 12,15%, según ha detallado Naturgy este viernes.
El crecimiento de la demanda de energía, una variable clave en el resultado de Naturgy, fue especialmente intenso en los países de América Latina en los que opera: Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, México, Panamá, Puerto Rico y la República Dominicana. Allí, el consumo eléctrico creció un 4,8% y el de gas se disparó un 22,5%. En España, estas cifras fueron más modestas: la demanda eléctrica creció un 2,4% y la de gas, un 5,4%.
El negocio en el bloque latinoamericano, sin embargo, se vio ligeramente penalizado por la depreciación de sus monedas frente al euro, que drenó ocho millones de euros al beneficio neto y 42 millones al Ebitda ordinario. La empresa, con todo, subraya que ese ritmo de depreciación se moderó el año pasado respecto a lo ocurrido en ejercicios anteriores, a pesar de que en Brasil y Argentina siguieron registrando una “depreciación notable” de sus divisas en 2021.
Para el año en curso, la compañía presidida por Francisco Reynés espera unas cifras generales de negocio similares a las obtenidas en 2021. La “volatilidad” del mercado energético, ha explicado el responsable de relación con los inversores de Naturgy, Steven Fernández, en la conferencia en la que la dirección de la compañía informa de los resultados a los analistas, hace especialmente complicado dar pistas sobre la evolución de los resultados en 2022. Con todo, Fernández espera que el Ebitda esté “al menos en línea con el de 2021, si no por encima”.