La crisis en el turismo se agrava al encadenar doce meses de descenso

El buen tiempo mejora las previsiones que tenía el sector para este puente

Aunque el puente de San José está dando un leve respiro al turismo en Euskadi, las alarmas siguen encendidas en el sector, que encadena ya doce meses consecutivos de caídas en la llegada de viajeros. Al igual que el pasado enero, la entrada de viajeros en hoteles disminuyó en febrero un 15% con respecto al mismo mes del año anterior, los peores batacazos de los últimos tres lustros.

La última encuesta que el Eustat hizo pública ayer precisa que los hoteles acogieron en febrero a 117.488 viajeros, frente a los 138.647 de igual mes de 2008. El descenso resultó más pronunciado en los turi...

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Aunque el puente de San José está dando un leve respiro al turismo en Euskadi, las alarmas siguen encendidas en el sector, que encadena ya doce meses consecutivos de caídas en la llegada de viajeros. Al igual que el pasado enero, la entrada de viajeros en hoteles disminuyó en febrero un 15% con respecto al mismo mes del año anterior, los peores batacazos de los últimos tres lustros.

La última encuesta que el Eustat hizo pública ayer precisa que los hoteles acogieron en febrero a 117.488 viajeros, frente a los 138.647 de igual mes de 2008. El descenso resultó más pronunciado en los turistas procedentes del extranjero (un 23% menos), frente al 13% que bajó el número de visitantes estatales. Las pernoctaciones ascendieron a 201.664, lo que se traduce en una caída del 19%. La estancia media ha bajado de 1,80 días a 1,72.

Fuera de las fechas fuertes del turismo de ocio, los hoteles tienen en el visitante de negocios su punto fuerte. "La crisis se está notando mucho. La empresa está muy tocada", apuntó ayer la subdirectora del Hotel Londres de San Sebastián, Elena Estomba. "Las empresas están recortando gastos. Personas que antes pernoctaban una noche ahora llegan en el primer vuelo del día y se marchan en el último. Y quien antes contaba con, por ejemplo, 50 euros para comidas, ahora tiene 35", corroboró el gerente de Destino Bilbao, Fernando Sánchez.

El caso es que la crisis económica unida a un invierno con una climatología especialmente adversa tiene más que preocupado al sector. Contra las inclemencias del tiempo poco se puede hacer, pero ante unos bolsillos temblando, hoteles y restaurantes han tenido que ajustar algo sus precios. "Solemos adaptar los precios en función de la ocupación", admitió Estomba. "Se ofrecen más promociones", ratificó Sánchez.

En los restaurantes cada vez resulta más habitual recurrir a los menús del día con un precio fijo, una opción más económica que tirar de carta. "Hemos tenido que hacer una reflexión interna y gestionar de otra manera", comentó el presidente de la Asociación de Empresarios Hosteleros de Guipúzcoa, Mikel Ubarrechena.

La situación de los agroturismos tampoco resulta buena, pero al menos su gráfica del último año combina subidas y bajadas. Eso sí, 2009 no ha empezado bien. En enero se redujo un 1% con respecto al mismo mes de 2008 la entrada de viajeros, mientras que en febrero el descenso fue del 6%. Se registraron 6.313 entradas, frente a las 6.691 de febrero de 2008.

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Ante este panorama, el sector turístico está viviendo el puente de San José con cierta esperanza. El magnífico tiempo se ha convertido más que nunca en un balón de oxígeno y, aunque no echan cohetes, hoteleros y hosteleros reconocen que la realidad está superando sus pesimistas previsiones para estos días. Con el sol y la buena temperatura, "la gente ha salido, se ha movido; los paseos, las playas, los bares y los restaurantes están bastante llenos", relató Ubarrechena.

Destino Bilbao encaraba estos días con la idea de alcanzar como mucho una ocupación hotelera del 45%. Visto los efectos del buen tiempo, confía en subir hasta el 55% o el 60%. "Con el buen tiempo ha habido suerte, estamos prácticamente completos", indicaron responsables del donostiarra Hotel Codina. El Londres ronda el 90% de ocupación.

Con este antecedente, unos y otros miran con cierto optimismo a Semana Santa, pero con prudencia. "La realidad es que la crisis es importante". No se aventuran a hacer predicciones, porque la gente cada vez apura más el tiempo para realizar las reservas.

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