Martinsa reconoce que la crisis le obligará a recortar plantilla

La promotora ya ha reducido un 35% la cifra de empleados

Unos datos tan malos como los del primer trimestre del año -descenso en las ventas del 45% y pérdidas de 85 millones de euros- no pueden pasar en balde. La crisis empuja a Martinsa-Fadesa a recortar su plantilla, que ahora asciende a unas 900 personas. Todavía no hay ni fecha ni cifra concreta del ajuste, pero los portavoces de la inmobiliaria aseguran que el recorte estará incluido en el plan de negocios que se presentará a la junta de accionistas de finales de junio.

La inmobiliaria que preside Fernando Martín ya lleva tiempo reduciendo su número de empleados. Si en junio del año pas...

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Unos datos tan malos como los del primer trimestre del año -descenso en las ventas del 45% y pérdidas de 85 millones de euros- no pueden pasar en balde. La crisis empuja a Martinsa-Fadesa a recortar su plantilla, que ahora asciende a unas 900 personas. Todavía no hay ni fecha ni cifra concreta del ajuste, pero los portavoces de la inmobiliaria aseguran que el recorte estará incluido en el plan de negocios que se presentará a la junta de accionistas de finales de junio.

La empresa busca inversores para un proyecto de 1.200 millones en Rumania
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La inmobiliaria que preside Fernando Martín ya lleva tiempo reduciendo su número de empleados. Si en junio del año pasado, tras la absorción de la gallega Fadesa por Martinsa, la nueva compañía sumaba más de 1.400 trabajadores, esta cifra se ha reducido ahora a 900. Es decir, una caída superior al 35% en menos de un año. El grueso de este ajuste se debe a la venta del negocio hotelero y de una fábrica de madera en Rumania, operaciones cerradas por la necesidad de Martinsa de obtener liquidez. El resto procede de las bajas incentivadas a trabajadores coruñeses que se negaban a trasladarse a Madrid, donde ahora está la sede operativa.

La empresa reconoce que la situación del sector ha empeorado considerablemente en los últimos meses y que la reorganización afectará a toda la plantilla, y no sólo a la gallega, donde continúa la sede social.

Los portavoces de la promotora aseguran que Martinsa es de las más obligadas a deshacerse de empleados. "Nos ocupamos directamente de labores muy intensivas en trabajo, como la arquitectura o la construcción. No las tenemos externalizadas como otras inmobiliarias, y eso hace que la crisis afecte más a nuestra plantilla", explican.

Mientras espera saber el número exacto de bajas, el presidente del comité de empresa en A Coruña, Fermín García, se teme lo peor y anticipa un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectaría a más del 50% de la plantilla en la provincia, informa Europa Press.

Tras la reunión que ayer mantuvieron los representantes de la empresa en A Coruña, otro miembro del comité, Paulo Carril, señaló que estaba previsto el despido de 74 de los alrededor de 200 empleados. "Si van a echar a más, será necesario desarrollar un ERE, que supone destituir al menos a la mitad de la plantilla", aseguró.

En tiempos en los que el sector inmobiliario sólo recibe palos dentro de casa, Martinsa-Fadesa busca inversores españoles y rumanos que participen en el proyecto de viviendas recién iniciado en Bucarest (Rumania). Requiere un capital de 1.200 millones de euros, de los que la inmobiliaria ha puesto 100.

La empresa asegura que el proyecto rumano, Bonaire Community City, ofrece inversiones con un potencial de revalorización de entre el 15% y el 20% a corto plazo.

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