Rechazo frontal de los médicos al plan que permitirá recetar a los enfermeros

La exclusividad en las decisiones sobre los medicamentos ha puesto a los colegios de médicos en pie de guerra. La Organización Médica Colegial ha llamado a la movilización ante la posibilidad de que los enfermeros puedan aconsejar a los pacientes el uso de algunos fármacos, o que les recomienden que cambien la dosis que toman. Es un enfrentamiento que implica a 400.000 colegiados, la mitad en cada uno de los bandos.

"La prescripción forma parte indivisible del acto médico", afirma la Organización en un comunicado destinado a parar la iniciativa, puesta en marcha por el Ministerio...

La exclusividad en las decisiones sobre los medicamentos ha puesto a los colegios de médicos en pie de guerra. La Organización Médica Colegial ha llamado a la movilización ante la posibilidad de que los enfermeros puedan aconsejar a los pacientes el uso de algunos fármacos, o que les recomienden que cambien la dosis que toman. Es un enfrentamiento que implica a 400.000 colegiados, la mitad en cada uno de los bandos.

"La prescripción forma parte indivisible del acto médico", afirma la Organización en un comunicado destinado a parar la iniciativa, puesta en marcha por el Ministerio de Sanidad, para que el personal de enfermería pueda recomendar algunos productos a los enfermos. Esta posibilidad está incluida en la ley de uso racional del medicamento que entró en vigor el 26 de julio de 2006. "Para facilitar la labor de los profesionales sanitarios en el plazo de un año el Ministerio de Sanidad y Consumo establecerá la relación de medicamentos que puedan ser usados o, en su caso, autorizados para estos profesionales, así como las condiciones específicas en las que los puedan utilizar y los mecanismos de participación con los médicos en programas de seguimiento de determinados tratamientos", dice la norma.

En cumplimiento de la ley, Sanidad tiene listo un borrador de orden en el que se detallan qué productos podrán ser recomendados por enfermeras. Se trata de un texto al que se había llegado por consenso, como insisten el ministerio y el Consejo General de Consejos de Farmacia, pero el acuerdo se ha roto.

Los productos afectados -calmantes, terapia dermatológica como pomadas, antiinfecciosos o antiinflamatorios- son medicamentos cuyo control ya hacen los enfermeros, y la orden lo que haría sería regularlo.

La situación ha abierto también una brecha entre los facultativos. El vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, Josep Basora, ha dicho que se trata de "reconocer de forma oficial algo que ya está sucediendo". En la misma línea se ha manifestado la Federación de Asociaciones Científico Médicas de España (Facme). "Todo se haría mediante protocolos y de forma consensuada", insisten los colegios de enfermería. Pero para los colegios de médicos la situación es inadmisible. Sanidad, mientras tanto, espera poder retomar el consenso.