Costa de Marfil paraliza por fraude las reparaciones por el vertido del 'Probo Koala'
El Ministerio de Finanzas de Costa de Marfil ha paralizado por fraude la tramitación de las indemnizaciones derivadas del vertido tóxico efectuado en agosto de 2006 por el buque Probo Koala en la ciudad de Abiyán, que causó 10 muertos y envenenó a unas 100.000 personas. Según las autoridades, "un 95% de los documentos de identidad presentados por las víctimas son falsos y han sido rellenados por estafadores sin escrúpulos".
Fletado por la compañía holandesa Trafigura, ésta delegó en una firma local la limpieza de sus 528 toneladas de residuos contaminantes que acabaron en basurer...
El Ministerio de Finanzas de Costa de Marfil ha paralizado por fraude la tramitación de las indemnizaciones derivadas del vertido tóxico efectuado en agosto de 2006 por el buque Probo Koala en la ciudad de Abiyán, que causó 10 muertos y envenenó a unas 100.000 personas. Según las autoridades, "un 95% de los documentos de identidad presentados por las víctimas son falsos y han sido rellenados por estafadores sin escrúpulos".
Fletado por la compañía holandesa Trafigura, ésta delegó en una firma local la limpieza de sus 528 toneladas de residuos contaminantes que acabaron en basureros al aire libre. Aunque Trafigura no admitió su responsabilidad directa en la tragedia, destinó 150 millones de euros a compensar a los afectados.
Emmanuel Kalou, portavoz del departamento marfilense de Finanzas, desveló ayer los pormenores del engaño sufrido por las víctimas del vertido. Como la mayoría son analfabetos, han permitido que "rufianes sin escrúpulos" rellenen en su nombre las solicitudes de compensación. A cambio, les exigen la mitad de la cantidad a percibir. En tales condiciones, "el Gobierno ha decidido no dar más dinero de momento para evitar el fraude".
Las 16 familias directas de los fallecidos debían recibir unos 150.000 euros cada una. Otras 75 personas que inhalaron los gases venenosos o bien fueron tratadas en el hospital por las emanaciones de la mezcla de gasolina, sosa cáustica y sulfuro de mercaptano arrojada a vertederos y lagunas, figuran asimismo entre los principales damnificados.
Meses después de la tragedia, el Ministerio holandés de Medio Ambiente admitió su responsabilidad por haber permitido que el Probo Koala abandonara el puerto de Amsterdam camino de África con sus residuos químicos a bordo. También reconoció que nunca debió permitirse que una vez paralizado su bombeo y limpieza por el mal olor que despedía, pudiera seguir navegando por otras aguas. Al llegar a Costa de Marfil, Trafigura dejó su limpieza en manos de Tommy, una firma local sin medios para hacerlo.