Toreros apoderados
Los toreros, dice el tópico, no suelen ser buenos ganaderos. Lo que hacen a la perfección, una vez retirados de los ruedos, es el apoderamiento. Toreros apoderados han sido innumerables en la historia taurina. Estos últimos años han proliferado como nunca y los resultados espectaculares a la vista están.
Curro Vázquez, el maestro de Linares, se ha inventado a Cayetano Rivera Ordóñez, el torero de moda. Lázaro Carmona, otro torero de Linares, dirige la carrera de Uceda Leal, el elegante maestro madrileño.
Antonio Corbacho fue el creador de José Tomás y ahora es el ha...
Los toreros, dice el tópico, no suelen ser buenos ganaderos. Lo que hacen a la perfección, una vez retirados de los ruedos, es el apoderamiento. Toreros apoderados han sido innumerables en la historia taurina. Estos últimos años han proliferado como nunca y los resultados espectaculares a la vista están.
Curro Vázquez, el maestro de Linares, se ha inventado a Cayetano Rivera Ordóñez, el torero de moda. Lázaro Carmona, otro torero de Linares, dirige la carrera de Uceda Leal, el elegante maestro madrileño.
Antonio Corbacho fue el creador de José Tomás y ahora es el hacedor de su paisano el jovencísimo Alejandro Talavante, el torero que más expectativas levanta.
Fernando Cepeda, el gran torero de Ginés, lleva al extremeño Miguel Ángel Perera. Los hermanos Campuzano, José Antonio, el grande, y Tomás, el enorme, están detrás de varios espadas. Manolo Cortés es un sabio preparador de futuros toreros tocados por la magia que él sabe transmitir. La del arte sin apellidos.
Raúl Galindo, Luis Miguel Villalpando, Fernando Lozano, Pedro Giraldo, Andrés Caballero. Toreros de efímera gloria apoderan con solvencia y criterio a toreros de la magnífica -y a veces no bien valorada- segunda fila.
El último -hasta hoy- torero ¿apoderado? El impar Rafael de Paula.
A Curro Romero aún no se le ha pasado por la cabeza, pero ¿quién sabe?