Casi la mitad de los catalanes no se ha conectado nunca a Internet

Telefónica critica las "trabas" a las antenas de telefonía móvil

Telefónica reivindicó ayer su "vocación de aliado estratégico" de Cataluña para desarrollar la sociedad de la información en esta comunidad, que avanza con distintas velocidades y en la que casi la mitad de la población vive al margen de Internet y nunca se ha conectado a la red. Pero la mayor empresa del sector pidió contrapartidas para tirar de la chequera de las inversiones. Su director en Cataluña, Kim Faura, cargó contra las trabas para el despliegue de antenas para la telefonía móvil y dijo que Barcelona empeora la calidad de sus telecomunicaciones.

Preguntados los ejecutivos de 5...

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Telefónica reivindicó ayer su "vocación de aliado estratégico" de Cataluña para desarrollar la sociedad de la información en esta comunidad, que avanza con distintas velocidades y en la que casi la mitad de la población vive al margen de Internet y nunca se ha conectado a la red. Pero la mayor empresa del sector pidió contrapartidas para tirar de la chequera de las inversiones. Su director en Cataluña, Kim Faura, cargó contra las trabas para el despliegue de antenas para la telefonía móvil y dijo que Barcelona empeora la calidad de sus telecomunicaciones.

Preguntados los ejecutivos de 507 empresas europeas sobre la calidad de las telecomunicaciones en Barcelona, ésta cayó seis puestos, del 19 al 13, en la clasificación de ciudades de 2006 de la consultora Cushman & Wakefield, conocida como European Cities Monitor.

Kim Faura sacó a colación este informe para demostrar que "los usuarios notan ya" problemas en la cobertura de móvil, deficiente sobre todo con la llegada de nuevos servicios como la transmisión de imágenes vía móvil. "Tenemos grandes dificultades para poder desplegar antenas y dar comunicaciones de banda ancha mediante la telefonía móvil", se quejó el directivo en presencia del consejero de Gobernación, Joan Puigcercós.

Telefónica tiene más clientes de móvil que de fija. En Cataluña, la proporción es de 3,4 millones frente a tres millones de acceso fijo.

Faura echó mano a estudios científicos en Dinamarca para descartar cualquier perjuicio de las antenas sobre la salud, "y no se entiende que los ayuntamientos denieguen nuevas licencias".

Faura criticó que el Gobierno catalán centre su interés en las infraestructuras de telefonía fija. No sólo frente a la telefonía móvil, sino a la hora de buscar culpables por los que Internet, pese a sus avances, no acabe de despegar. Y es que el uso de Internet progresa deprisa -las conexiones con ADSL se dispararon un 33% el año pasado, por ejemplo-, pero no por ello una parte importante de la población deja de vivir al margen de la red. Según la Fundación Telefónica y su libro La sociedad de la información, presentado ayer en Barcelona, en el último año se conectó a Internet al menos una vez en los últimos tres meses un 53,2% de los catalanes (un 47,8% en 2005), sobre el 47% de la media española. El informe afirma que un 46,1% de los catalanes nunca han utilizado Internet.

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Y más de la mitad (un 54%) de las microempresas de menos de 10 trabajadores, como comercios o bares y que son la mayor parte del tejido industrial, no se conecta. "El problema no es de falta de acceso, no es de infraestructura. El problema es la falta de interés que existe sobre los beneficios que puede reportar Internet", replicó Faura.

Aunque no hubo enfrentamiento, Puigcercós insistió en la importancia de las infraestructuras más allá de Telefónica, porque "la competencia es buena" y es necesario "poner en valor todos los kilómetros de fibra óptica en Cataluña y que no se usan". El consejero no explicitó su voluntad de impulsar un operador público de telecomunicaciones, que Telefónica rechaza.

La inversión crece un 14%

El presidente de Telefónica, César Alierta, desveló recientemente en una conferencia de analistas que el grupo preveía invertir 10.000 millones de euros en extender la banda ancha, a través de la red fija y de la red móvil. Ayer, Kim Faura aseguró que Telefónica quiere que "la mayor parte" de este dinero vaya a Cataluña, "si las condiciones de regulación lo permiten". En 2006, la inversión aumentó un 14%, hasta los 342 millones.

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