Los Remedios baja la media

Si el PP quería de verdad que la gente fuera a votar, su fracaso fue mayor que el del PSOE a la hora de movilizar a su electorado de Sevilla. La participación de la capital se situó algo por debajo de la media andaluza (34,89%), pero los barrios que más contribuyeron a tirar para abajo de ese porcentaje fueron los tradicionales feudos populares. Sobre todo, Los Remedios, donde vive el electorado más fiel al PP y que ayer se quedó en casa en mayor proporción que en el resto de la ciudad. La participación en esta zona de la capital fue del 26,84%, casi diez puntos por debajo de la media.

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Si el PP quería de verdad que la gente fuera a votar, su fracaso fue mayor que el del PSOE a la hora de movilizar a su electorado de Sevilla. La participación de la capital se situó algo por debajo de la media andaluza (34,89%), pero los barrios que más contribuyeron a tirar para abajo de ese porcentaje fueron los tradicionales feudos populares. Sobre todo, Los Remedios, donde vive el electorado más fiel al PP y que ayer se quedó en casa en mayor proporción que en el resto de la ciudad. La participación en esta zona de la capital fue del 26,84%, casi diez puntos por debajo de la media.

A la vista de los resultados, o los electores más afines al PP desertaron por un día de los dirigentes populares, o estos han enviado un mensaje ambiguo. Porque la peculiaridad de Los Remedios no fue sólo su bajísima participación, sino que además, de los pocos que fueron a votar, uno de cada tres (33,61%) votó contra el Estatuto.

La de ayer fue la primera cita con las urnas desde que Sevilla pasó de tener seis a once distritos, por lo que comparar los resultados con convocatorias anteriores es difícil. No obstante, los tres barrios en los que tradicionalmente arrasa el PP fueron también ayer los distritos con menos participación: Los Remedios, Casco Antiguo (31,04) y Nervión (31,78).

Los feudos del PSOE, como Macarena, Bellavista y San Pablo, son también los que ayer congregaron a más votantes, pero, a la vista de los resultados, los socialistas tampoco supieron movilizar a sus electores para que sus barrios más fieles contribuyeran a inflar algo la media de participación de la capital. En los grandes feudos del PSOE, la participación fue algo más elevada que en el resto de la ciudad, pero en ninguno llegó al 39%. La más alta se registró en Macarena Norte, donde votaron el 38,73% de los electores.

Mucho más reveladora resulta la comparación de votos a favor y en contra del Estatuto en uno y otro barrio. La media de noes en la capital se situó en el 12,40%. Por debajo, con un sí muy mayoritario, quedaron los barrios donde el PSOE suele recabar más votos: en Cerro-Amate, el 92,43% de los que fueron a votar cogieron la papeleta del sí, una opción por la que se decantó el 91,30% de los que votaron en Macarena Norte. En el extremo opuesto, y al margen de Los Remedios, uno de cada cuatro vecinos (24,12%) del Casco Antiguo se opuso al Estatuto, lo mismo que el 23,1% de los electores que acudieron a las urnas de Nervión.