El hospital de Bellvitge apuesta por Internet para tratar a pacientes de bulimia con diagnóstico leve

El hospital de Bellvitge ha introducido Internet para tratar a los pacientes bulímicos menos graves. Así lo han hecho 40 pacientes y, datos en mano, el tratamiento virtual es efectivo, según el estudio realizado por los responsables de la unidad. Cada día, los pacientes tienen que rellenar electrónicamente un cuestionario en el que tienen que detallar lo que han comido durante la jornada, y también si han comido compulsivamente y luego han vomitado. Además, reciben periódicamente guías, tienen que hacer ejercicios y están en permanente contacto con los especialistas.

El seguimiento func...

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El hospital de Bellvitge ha introducido Internet para tratar a los pacientes bulímicos menos graves. Así lo han hecho 40 pacientes y, datos en mano, el tratamiento virtual es efectivo, según el estudio realizado por los responsables de la unidad. Cada día, los pacientes tienen que rellenar electrónicamente un cuestionario en el que tienen que detallar lo que han comido durante la jornada, y también si han comido compulsivamente y luego han vomitado. Además, reciben periódicamente guías, tienen que hacer ejercicios y están en permanente contacto con los especialistas.

El seguimiento funciona y, como explica el responsable de la Unidad de Trastornos Alimentarios de Bellvitge, Fernando Fernández Aranda, puede ser una herramienta para ayudar a los pacientes poco graves. Fernández recuerda que la Red no quiere "sustituir" a las terapias presenciales. "Internet permite llegar a pacientes leves, los que no cumplen todos los requisitos para diagnosticar que tienen bulimia". Se considera que un paciente es bulímico si "come hasta hartarse y luego vomita un mínimo de dos veces por semana", explica Fernández.

La Unidad de Trastornos Alimentarios del hospital de Bellvitge ha presentado este proyecto piloto, que ha realizado junto con otros centros europeos, en el Congreso Internacional sobre Trastornos de la Alimentación que se ha celebrado esta semana en Barcelona, y que ha contado con la asistencia de 900 expertos. Entre los ámbitos que se han abordado en el congreso, destaca el reto que supone para los especialistas tratar los trastornos alimentarios atípicos: los pacientes que no son ni anoréxicos ni bulímicos pero que tienen desarreglos en la ingesta de alimentos, como los que comen compulsivamente. Estos casos atípicos, explica Fernández, "representan la mitad de los trastornos alimentarios".

Otra novedad es la introducción de terapias de grupo en la que sólo participan hombres, que, según Fernández, "representan entre el 6% y el 8% de los casos". "Los hombres presentan unas características diferentes: normalmente no ingresan y muchos de ellos están obsesionados en muscularse o hacer ejercicio físico".

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