Salud multa con 90.000 euros al hospital Duran i Reynals por un brote de legionela

La infección causó la muerte de dos pacientes de este centro de la Generalitat

La Generalitat ha impuesto una multa de 90.000 euros al hospital oncológico Duran i Reynals de L'Hospitalet de Llobregat por el brote de legionela que se registró en el centro hace un año y que se saldó con 12 pacientes afectados, dos de los cuales fallecieron. La Generalitat ha considerado que el hospital, perteneciente al Servicio Catalán de la Salud, es decir, a la propia Administración catalana, incumplió los protocolos de mantenimiento de su red de distribución de agua, que estaba colonizada por la legionela. Las variaciones de temperatura del agua facilitaron su proliferación.

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La Generalitat ha impuesto una multa de 90.000 euros al hospital oncológico Duran i Reynals de L'Hospitalet de Llobregat por el brote de legionela que se registró en el centro hace un año y que se saldó con 12 pacientes afectados, dos de los cuales fallecieron. La Generalitat ha considerado que el hospital, perteneciente al Servicio Catalán de la Salud, es decir, a la propia Administración catalana, incumplió los protocolos de mantenimiento de su red de distribución de agua, que estaba colonizada por la legionela. Las variaciones de temperatura del agua facilitaron su proliferación.

Los dos pacientes que fallecieron sufrían un cáncer en estado muy avanzado y no superaron la infección por legionela sobrevenida. Otros 10 pacientes del centro contrajeron legionelosis. El brote supuso, según admitió ayer el director de Salud Pública de la Generalitat, Antoni Plasencia, una "afectación grave para la salud de personas especialmente vulnerables". Éste es uno de los argumentos que, según Plasencia, justifican la elevada multa que la Generalitat ha impuesto al hospital Duran i Reynals. Pero el expediente y la investigación que se abrió al centro tras detectarse ha permitido constatar que, además de no garantizar los niveles de temperatura exigidos para evitar la proliferación de bacterias, el hospital no realizó los controles y el seguimiento necesarios para su detección.

Ésta es la primera vez que la Generalitat multa a un hospital propio por un brote de legionela. Plasencia destacó que la actuación del Departamento de Salud demuestra que se "actúa con la misma firmeza en los centros propios como en los que no son públicos".

Plasencia compareció ayer en el Parlament junto con la consejera de Salud, Marina Geli, para explicar la actuación de la Generalitat con relación al brote de legionela que se detectó en Vic (Osona), que se cobró la vida de dos personas. La Generalitat sostiene que las torres de refrigeración que originaron este brote, pertenecientes a la empresa Precuinats Osona, estaban bien diseñadas, y no así el protocolo de limpieza de los sitemas. Plasencia señaló que en este caso hay pocas posibilidades de que la empresa acabe siendo sancionada.

Según los datos dados a conocer ayer por el Departamento de Salud, en el año 2005 se cuadruplicó el número de torres de refrigeración de empresas revisadas por motivos de prevención. Así, se llevaron a cabo 2.294 revisiones, frente a las 522 del año anterior.

El Departamento de Salud abrió nueve expedientes, siete de los cuales han sido resueltos,

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Las sanciones impuestas han oscilado entre 4.000 euros por "declaraciones y registros incompletos" y los 90.000 correspondientes al Duran i Reynals, según el director de Salud Pública.

De acuerdo con las cifras de Salud, en el año 2005 hubo un total de cuatro muertes por legionela, una más que el año anterior, y un 44 brotes, frente a los 28 de 2004. La consejera Geli insistió en que la legionela no es una causa de muerte en personas sanas, pero puede tener consecuencias letales entre personas de edad avanzada o de la salud frágil.

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