Los españoles se acercan a las víctimas
Ya queda menos. Menos tiempo y menos kilómetros. Algunos de los soldados españoles que partieron a Pakistán dentro de la primera misión humanitaria de la OTAN para ayudar a las víctimas del terremoto en Cachemira, ya se encuentran a sólo un día de viaje de la zona afectada. Después de pasar 48 horas en un hangar del aeropuerto de Lahore sin hacer otra cosa que esperar, 36 de los 87 soldados enviados por el Ejército español partieron ayer hacia Rawalpindi, ciudad situada a dos kilómetros de Islamabad, y unas seis horas en coche de Bag, la ciudad en cuyas proximidades pretende instalarse la expe...
Ya queda menos. Menos tiempo y menos kilómetros. Algunos de los soldados españoles que partieron a Pakistán dentro de la primera misión humanitaria de la OTAN para ayudar a las víctimas del terremoto en Cachemira, ya se encuentran a sólo un día de viaje de la zona afectada. Después de pasar 48 horas en un hangar del aeropuerto de Lahore sin hacer otra cosa que esperar, 36 de los 87 soldados enviados por el Ejército español partieron ayer hacia Rawalpindi, ciudad situada a dos kilómetros de Islamabad, y unas seis horas en coche de Bag, la ciudad en cuyas proximidades pretende instalarse la expedición española. Mientras los 36 militares avanzaban en un convoy escoltado por soldados paquistaníes hacia Rawalpindi, el general al mando de la operación, Juan Antonio Bautís, inspeccionaba la zona del terremoto y delimitaba tres áreas de reconstrucción.
La misión de la OTAN contempla el envío de 370 militares españoles y un total de 814. La mayoría de ellos pasarán un plazo de tres meses en Cachemira. El área de Bag es de las más inhóspitas para trabajar, según el embajador de España en Islamabad, José María Robles Fraga. "El acceso a Bag es más complicado, las montañas son más cerradas, la vida es más dura. Los bomberos y médicos españoles que trabajaron en esa zona eran gente con experiencia en varias catástrofes. Pero llegaban de allí exhaustos, cansados física y mentalmente. Porque trabajas las 24 horas", indicó Robles Fraga. El embajador de España considera que el Gobierno paquistaní actuó con diligencia y hace todo lo posible por colaborar con España.
La avanzadilla española de 36 soldados que llegó ayer a Rawalpindi con la intención de viajar lo antes posible al área del terremoto viajó durante todo el día en tres autobuses y tres camiones. Su misión es instalar un campamento para acoger al resto de la tropa que llegará en los días sucesivos. "El militar español puede que no siempre tenga los mejores medios pero tiene una tremenda capacidad de invención y de solucionar problemas", apuntó Robles Fraga.