Pablo Malo logra tres premios en el Festival Viña del Mar para 'Frío sol de invierno'
Frío sol de invierno, el primer largometraje del realizador donostiarra Pablo Malo, no deja de acumular premios. Galardonado en la última edición de los Goya con el premio a la mejor dirección novel, ha sido reconocido con tres galardones en la 17ª edición del Festival de Cine de Viña del Mar (Chile), que finalizó el pasado sábado. Aunque el filme ganador del certamen fue En la cama, del chileno Matías Bize, la cinta de Malo se hizo con los premios al mejor actor (Unax Ugalde), a la mejor actriz de reparto (Marisa Paredes) y a la mejor fotografía (Pablo Rosso), con lo que se conv...
Frío sol de invierno, el primer largometraje del realizador donostiarra Pablo Malo, no deja de acumular premios. Galardonado en la última edición de los Goya con el premio a la mejor dirección novel, ha sido reconocido con tres galardones en la 17ª edición del Festival de Cine de Viña del Mar (Chile), que finalizó el pasado sábado. Aunque el filme ganador del certamen fue En la cama, del chileno Matías Bize, la cinta de Malo se hizo con los premios al mejor actor (Unax Ugalde), a la mejor actriz de reparto (Marisa Paredes) y a la mejor fotografía (Pablo Rosso), con lo que se convirtió en la gran vencedora del festival. Desde su estreno en noviembre de 2004, la película ha cosechado una quincena de galardones, entre ellos, y además del Goya, el premio Altadis-Nuevos Realizadores en el 52º Festival de Cine de San Sebastián. "A pesar de ser numerosos, los premios siempre hacen muchísima ilusión. Quieren decir que se acuerdan de uno, que la película sigue funcionando", afirmaba ayer Malo (San Sebastián, 1965), que se encuentra inmerso en la "pre-preproducción" de su segundo trabajo. "Aún estamos con las localizaciones y esas cosas", concreta.
El filme premiado en Chile es un melodrama sobre un joven desarraigado que acaba de salir de un psiquiátrico. En la búsqueda de su padre se encuentra con personajes que viven al límite, como él mismo. "El sol que se cuela a duras penas entre las nubes y nunca calienta es como el estado de ánimo de estos personajes", explicó Malo en el estreno del filme. Una de las quejas del director, a pesar de los numerosos reconocimientos de su ópera prima, es no haber obtenido "una gran taquilla", ya que un presupueso ajustado no había permitido un alarde de producción. "El Goya supuso un gran empujón y, desde luego, ha sido determinante para poder embarcarme en mi segunda película en seguida y con un presupesto mayor", comenta.
La "espinita"
Quizá con este filme el director donostiarra pueda sacarse esa "espinita" de la taquilla. Algún día seré yo, el título previsto para este segundo trabajo, se desarrolla en un internado de chicas y comenzará a rodarse el próximo año. "Los premios de Frío sol de invierno no me presionan para esta segunda película. No hago las cosas pensando en los premios y no me siento, por ahora, presionado", apunta Malo, que destaca su ilusión por "cambiar de género" y adentrarse ahora en "el suspense y el thriller".
En esta edición, el Festival Viña del Mar contó con una amplia muestra de cinematografía iberoamericana, con películas procedentes de Andorra, Argentina, Brasil, Cuba, Chile, España, México y Venezuela, y la presencia de la actriz argentina Cecilia Roth, quien fue homenajeada. El premio a la mejor dirección fue para el brasileño Jaime Monjardin por su película Olga.