Congresistas de EE UU piden el cierre de la cárcel de Guantánamo

El gulag en el que, según Amnistía Internacional (AI), se ha convertido la base-prisión estadounidense de Guantánamo daña la imagen exterior de este país hasta el punto de que se alzan destacadas voces que piden su cierre. El centro de detenciones en Guantánamo ha sido objeto de críticas no sólo de organismos internacionales, sino también de líderes del Congreso de Estados Unidos, que ahora apoyan la idea de realizar audiencias para analizar el maltrato a los 540 extranjeros allí detenidos, las mayoría de ellos sospechosos de estar implicados en actos de terrorismo.

El senador Jo...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El gulag en el que, según Amnistía Internacional (AI), se ha convertido la base-prisión estadounidense de Guantánamo daña la imagen exterior de este país hasta el punto de que se alzan destacadas voces que piden su cierre. El centro de detenciones en Guantánamo ha sido objeto de críticas no sólo de organismos internacionales, sino también de líderes del Congreso de Estados Unidos, que ahora apoyan la idea de realizar audiencias para analizar el maltrato a los 540 extranjeros allí detenidos, las mayoría de ellos sospechosos de estar implicados en actos de terrorismo.

El senador Joseph Biden, el demócrata de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, fue aún más lejos al sugerir el domingo que EE UU debe cerrar el centro de detenciones porque sólo sirve de "instrumento de propaganda" para el reclutamiento de terroristas. "Me parece innecesario que estemos en esa posición", dijo Biden en un programa de la cadena de televisión ABC. Biden apoya la idea de crear una comisión independiente que recomiende mejoras en Guantánamo, pero aconsejó: "Al final, creo que deberíamos cerrarlo y trasladar a los prisioneros".

Más información

En ese mismo sentido se pronunció el diario The New York Times, que en un editorial del domingo afirmó, además, que Guantánamo es "un regalo propagandístico para los enemigos de EE UU" y una "fuente de vergüenza ajena para nuestros aliados".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Archivado En