Rajoy reclama a Zapatero que rectifique su política y "no invite a ETA al diálogo"

Mariano Rajoy aseguró ayer que la manifestación del pasado sábado en Madrid, convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y apoyada por el PP contra una eventual negociación con ETA, sólo permite una conclusión: "Que el Gobierno rectifique". El líder del PP mantuvo que esa manifestación es "la mayor que se ha celebrado en España desde la Transición". Con esa tesis, emplazó a José Luis Rodríguez Zapatero a "demostrar su talante" con la rectificación de su política antiterrorista. Tal rectificación incluye "no invitar a ETA al diálogo" en ningún caso y abandonar la resolución apr...

Mariano Rajoy aseguró ayer que la manifestación del pasado sábado en Madrid, convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y apoyada por el PP contra una eventual negociación con ETA, sólo permite una conclusión: "Que el Gobierno rectifique". El líder del PP mantuvo que esa manifestación es "la mayor que se ha celebrado en España desde la Transición". Con esa tesis, emplazó a José Luis Rodríguez Zapatero a "demostrar su talante" con la rectificación de su política antiterrorista. Tal rectificación incluye "no invitar a ETA al diálogo" en ningún caso y abandonar la resolución aprobada en el Congreso si la banda deja la violencia, instar ya a la ilegalización del PCTV y destituir a Gregorio Peces-Barba.

El presidente de los populares aprovechó ayer una reunión de la Junta Directiva Nacional de su partido (el máximo órgano de ese partido entre congresos) para proclamar que la manifestación del sábado fue "la mayor celebrada en España desde la transición", aunque evitó dar cifra alguna del número de manifestantes. Mariano Rajoy añadió que la manifestación -convocada por la Asociación Víctimas del Terrorismo y apoyada por el PP- fue "un rotundo éxito" y se demostró "ejemplar" porque "no hubo incidentes". Pero, sobre todo, según él, sirvió para "apoyar el sentido común, una política eficaz contra ETA, el Pacto Antiterrorista, el cumplimiento estricto de la ley, y que no se puede pagar ningún precio a ETA" para que deje de matar.

Rajoy reiteró que "el Gobierno ha roto el Pacto, se ha apartado de su espíritu de manera palmaria y notoria, y es mentira que siga cumpliéndolo como dice". Enumeró cinco motivos por los que, según él, el Ejecutivo ha dejado de cumplir el Pacto Antiterrorista: "Ha permitido que el Partido Comunista de las Tierras Vascas esté en el Parlamento vasco; ha prometido, a través de su candidato a lehendakari, Patxi López, las dos mesas de diálogo que reclama Batasuna y que son dos disparates colosales; ha establecido contactos entre el PSE y Batasuna; ha hecho múltiples llamadas al diálogo a ETA, y ha invitado, a través del Congreso de los Diputados, a una organización terrorista a negociar con el Gobierno de España".

"Batalla sin cuartel"

Esto último, la resolución votada por todos los grupos excepto el PP tras el debate sobre el estado de la nación para que el Ejecutivo abra una vía de diálogo con ETA siempre y cuando la banda abandone antes la violencia, es, según Rajoy, "un disparate monumental, el error más colosal, y no hay ningún Gobierno en el mundo que haga tal cosa". Por eso, a su juicio, la manifestación del sábado debiera servir para arrinconar esa iniciativa parlamentaria y volver al "espíritu del Pacto" que, según él, defiende "dar una batalla sin cuartel contra el terror".

La "batalla sin cuartel" es, en opinión de Rajoy, "lo más eficaz" que se ha hecho contra ETA porque "le daba a los terroristas un mensaje nítido: 'Usted la única alternativa que tiene es dejar de ser terrorista", y porque estaba "apoyada por los dos partidos que pueden ser Gobierno en España", es decir, por el PSOE y el PP. Como elemento clave de esa política destacó la Ley de Partidos, que permitió la ilegalización de Batasuna, y se quejó del protagonismo que esa "organización ilegal" ha recobrado en los últimos tiempos. Por ejemplo, con la manifestación que celebró el sábado en Bilbao.

Antes del Pacto Antiterrorista, relató Rajoy, "se probaron muchas cosas". Él se refirió a "las conversaciones de Argel y a la guerra ilegal" de los GAL, pero no mencionó la reunión en la localidad suiza de Zurich de una delegación del ex presidente del Gobierno José María Aznar con la banda ETA.

El líder del PP le dijo a los miembros de la Junta Directiva de su partido que él "sólo encuentra dos explicaciones" para el cambio de estrategia terrorista del Gobierno socialista. Enumeró tres. La primera es "que el presidente haya tenido una visión, como cuando previó que iba a ganar John Kerry en Estados Unidos o cuando apostó porque iba a salir que sí a la Constitución europea en Francia". La segunda explicación pasa porque "Zapatero se haya creído que puede pasar a la Historia en media hora", lo que, según Rajoy, "es, como mínimo, insensato". Y la tercera es que el Ejecutivo o su presidente "ya haya negociado con ETA".

El líder del PP mantuvo que "no hay más posibilidades" y que estas conclusiones suyas no son una "cuestión ideológica, sino de sentido común".

A partir de ahí, Rajoy pidió al presidente del Gobierno que "rectifique" y prometió que, si lo hace, "le apoyarán el PP y muchísimos españoles". Le emplazó a hacerlo apelando a su talante: "Si tanto talante tiene, ahora tiene una magnífica oportunidad de demostrarlo rectificando". Sólo así el PP considerará que el talante de Zapatero es "una convicción y no sólo un eslogan".

Ilegalización del PCTV

Tal rectificación requiere que, en primer lugar, "promueva de una vez la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas". El presidente de los populares mantuvo que "hay oleadas de pruebas" para instar a esa ilegalización "y ninguna en contra".

El segundo elemento de la rectificación que el PP pretende del Gobierno pasa por la destitución de Gregorio Peces-Barba como Alto Comisionado de Apoyo de las Víctimas del Terrorismo. "Peces-Barba no puede seguir", afirmó Rajoy. No pidió que sea otra persona quien ocupe ese cargo, sino que éste desaparezca. "No hacía falta crear esa figura", según Rajoy, porque ya existe en el Ministerio del Interior la vía para coordinar el apoyo a las víctimas del terrorismo. Además, el líder popular reiteró que el nombramiento de Peces-Barba "fue una decisión unilateral" de Zapatero y sólo ha servido para "dividir" a las víctimas.

El tercero, y más relevante, pasa por anular cualquier posibilidad de negociación con ETA. Esa eventual negociación con los terroristas es "un disparate", según Rajoy, porque "no cuenta con el apoyo de las víctimas, ha producido división en la sociedad española y en las víctimas, ha reconocido una especie de legitimidad a la representación de ETA y ha debilitado al Estado".