Una exposición muestra cómo Dalí manipulaba los libros

Salvador Dalí era al mismo tiempo un compulsivo lector y un incontrolable manipulador de libros. A menudo no podía resistirse a añadir inscripciones o dibujos, convirtiendo los márgenes del texto o las ilustraciones originales en delirantes muestras de su método paranoico-crítico. El castillo Gala-Dalí de Púbol, en La Pera (Girona), da cobijo hasta el 31 de diciembre a Dalibros, una propuesta expositiva que se asoma, en pequeño formato y sin afán exhaustivo, al Dalí lector.

En un primer ámbito se muestran un conjunto de fotografías poco divulgadas en las que Dalí o Gala aparecen ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Salvador Dalí era al mismo tiempo un compulsivo lector y un incontrolable manipulador de libros. A menudo no podía resistirse a añadir inscripciones o dibujos, convirtiendo los márgenes del texto o las ilustraciones originales en delirantes muestras de su método paranoico-crítico. El castillo Gala-Dalí de Púbol, en La Pera (Girona), da cobijo hasta el 31 de diciembre a Dalibros, una propuesta expositiva que se asoma, en pequeño formato y sin afán exhaustivo, al Dalí lector.

En un primer ámbito se muestran un conjunto de fotografías poco divulgadas en las que Dalí o Gala aparecen en compañía de libros. Se trata de imágenes de fotógrafos de prestigio entre los que destacan Brassaï, Man Ray, Eric Schaal o Català Roca. Mientras las imágenes de Gala evocan una reposada lectura cotidiana, Dalí no puede resistirse a encaramarse a leer sobre una chimenea o a cobijarse bajo una mesa. Montse Aguer, directora del Centro de Estudios Dalinianos, recordó que Gala acostumbraba a leer libros en voz alta a Dalí mientras éste pintaba. Ambos apreciaban los libros y llegaban casi a considerarlos, según Aguer, "un objeto sagrado". Dalí buscaba en ellos la fuente de inspiración. A menudo, el fogonazo creativo que nacía de una imagen o un párrafo de un libro no podía esperar a plasmarse en una hoja en blanco, sino que ocupaba los márgenes de la publicación o invadía y transformaba un elemento impreso en otro totalmente distinto.

José Manuel Lara, que participó en la inauguración de la muestra temporal en calidad de editor de la obra completa de Dalí, aseguró que no conoce un caso comparable en el que alguien pueda aproximarse con tanta fuerza a los libros desde cuatro ámbitos distintos: como lector, como autor, como personaje y como ilustrador. Lara admitió que quizá la edición limitada del Quijote ilustrado por Dalí que Planeta sacó a la venta el año pasado sea el libro más bello que ha editado jamás. Esa obra, que salió a un precio de 3.000 euros, ya se cotiza a 12.000. Aguer recordó que durante el ya finalizado Año Dalí se han publicado unos 150 títulos sobre el pintor.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En