Los trabajadores de Caballito rechazan la propuesta de arbitraje de la dirección tras más de siete meses de paro

El presidente del comité de empresa de Pferd-Rüggeberg, más conocida como Caballito, Joseba Leza, de ELA, rechazó ayer la propuesta de arbitraje realizada el jueves por la dirección de la multinacional alemana como la última vía para resolver la huelga de la planta alavesa, que dura ya más de siete meses. La razón aludida por Leza para evitar un arbitraje y optar por la mediación del

Procedimiento de Resolución de Conflictos (Preco) es que los laudos son de obligado cumplimiento y, por tanto, no pueden someterse a la votación de la asamblea de trabajadores, mientras que la mediación imp...

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El presidente del comité de empresa de Pferd-Rüggeberg, más conocida como Caballito, Joseba Leza, de ELA, rechazó ayer la propuesta de arbitraje realizada el jueves por la dirección de la multinacional alemana como la última vía para resolver la huelga de la planta alavesa, que dura ya más de siete meses. La razón aludida por Leza para evitar un arbitraje y optar por la mediación del

Procedimiento de Resolución de Conflictos (Preco) es que los laudos son de obligado cumplimiento y, por tanto, no pueden someterse a la votación de la asamblea de trabajadores, mientras que la mediación implica un sistema permanente de consultas.

El Preco es el sistema voluntario para la solución de conflictos laborales creado por las centrales y las patronales más representativas del País Vasco. La dirección de Caballito ha rechazado este procedimiento en repetidas ocasiones, a pesar de que el comité de empresa está incluso dispuesto a aceptar un mediador propuesto por la dirección.

Leza realizó estas declaraciones tras participar en una concentración de protesta ante el Palacio de Ajuria Enea que conckutó con enfrentamientos entre los concentrados y agentes de la Ertzaintza, sin que se produjeran heridos. Leza hizo un llamamiento a todos los trabajadores de Vitoria para que se sumen al paro simbólico convocado para el 9 de junio en solidaridad con la plantilla de Caballito.

Por otra parte, los miembros de ELA, LAB y ESK en el comité de empresa

de Michelín en Vitoria, en el que las centrales nacionalistas están en minoría, anunciaron ayer que dejan abierta la puerta a medidas de presión contra la dirección si finalmente el 10 de junio se firma en el comité intercentros el convenio para los 8.500 trabajadores -de las plantas de Vitoria, Lasarte, Valladolid y Aranda-. Estos sindicatos criticaron que CCOO, UGT y CSI no van a consultar a las diferentes plantillas antes de firmar "un mal convenio".

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