Majorica despedirá al 57% de su plantilla y producirá en Asia

El Gobierno balear denegará ayudas si no se mantiene el empleo

Majorica, empresa dedicada a la perla artificial y la bisutería creada hace 115 años en Manacor (Mallorca), ha anunciado a los comités de empresa que su plan de viabilidad pasa por el despido de 227 de los 401 trabajadores, un 57% de la plantilla. Los nuevos gestores, Drasan Limited (filial del grupo francés Saga), radicarán parte de la producción en Asia. Los gobernantes autonómicos admiten su escaso margen de respuesta y afirman que cualquier ayuda está sujeta al mantenimiento de la producción en la isla y del empleo.

Hace cuatro años, en las factorías mallorquinas y en la central com...

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Majorica, empresa dedicada a la perla artificial y la bisutería creada hace 115 años en Manacor (Mallorca), ha anunciado a los comités de empresa que su plan de viabilidad pasa por el despido de 227 de los 401 trabajadores, un 57% de la plantilla. Los nuevos gestores, Drasan Limited (filial del grupo francés Saga), radicarán parte de la producción en Asia. Los gobernantes autonómicos admiten su escaso margen de respuesta y afirman que cualquier ayuda está sujeta al mantenimiento de la producción en la isla y del empleo.

Hace cuatro años, en las factorías mallorquinas y en la central comercial de Barcelona trabajaban 625 personas. Entonces, al estallar la crisis, se planteó un expediente de regulación de empleo (ERE) para 145 trabajadores que fue rechazado, y se dio un goteo de jubilaciones y despidos. La compañía entró en suspensión de pagos, con 42 millones de deuda, de los que 30 millones eran con el Santander. El grupo de inversiones catalanes, encabezados por Rafael Español, que en 2002 intentó reactivar el negocio, vendió meses atrás la mayoría y pasó el control a Drasan, aunque sigue en el capital.

La aparente deslocalización industrial de una de las pocas empresas de manufactura de Mallorca se evidencia en los sectores donde se realizan los recortes laborales: 130 se efectuarán en la nómina de la fábrica de perlas, que tiene 226 puestos; 85 de los 115 trabajadores de la factoría de joyas también se quedarán en la calle, como sucederá a 21 de los 67 trabajadores de las tiendas.

Claude Ries, nuevo consejero delegado de la empresa, aseguró que la producción es deficitaria, por encima del valor del mercado y del coste de otros competidores, con lo que se va camino de la quiebra si no solventan los desajustes. "La reestructuración de la compañía se efectúa con el fin de rebajar los costes de la empresa y asegurar su viabilidad", sostuvo Gonzalo Serraclara, portavoz del consejo.

Respuesta sindical

Manuel Pelarda, del sindicato UGT, anunció que su sindicato "no firmará un acuerdo con la empresa que implique la destrucción de tantos puestos de trabajo y la deslocalización del tejido industrial de Manacor".

Por su parte, el dirigente de CCOO, José Benedicto, aseguró que se ha de intentar "convencer" a la empresa de la "importancia de invertir en la industria".

Las principales acusaciones críticas por parte de los trabajadores se lanzaron ayer contra el núcleo de financieros que concertó Rafael Español, quien aseguró tener un plan industrial de cinco años para reflotar la empresa. El equipo de Español eran Alfredo Coco, director general, y Josep Sardà, consejero, mientras que el capital lo aportaron Macià Alavedra, Pere Andrés, Albert Costafreda, Rafael Tous Godia, José María Xercavins, Josep Crehueras, Antonio Zaforteza Rodés y Sandro Podini.

Los trabajadores reclaman a las autoridades que no permitan a Majorica que cese la actividad productiva y pueda realizar la transformación inmobiliaria del solar de 47.000 metros cuadrados de suelo urbano de Manacor, donde existe la actual factoría de perla artificial.

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