Pastor pone en duda que subir el precio del tabaco reduzca el consumo

La ministra de Sanidad, Ana Pastor, puso ayer en duda que el aumento del precio del tabaco influya en el consumo. "El impacto del precio no está totalmente demostrado. Hay estudios con resultados contradictorios y tenemos que evaluar cuál es el precio del tabaco en España y qué se puede hacer para bajar el consumo", afirmó en la conferencia de prensa para presentar el Día Mundial sin Tabaco.

Haik Nikogosian, experto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que estaba sentado junto a Pastor, discrepó, una vez finalizado el acto: "No hay ninguna duda de que subir el precio es la mej...

La ministra de Sanidad, Ana Pastor, puso ayer en duda que el aumento del precio del tabaco influya en el consumo. "El impacto del precio no está totalmente demostrado. Hay estudios con resultados contradictorios y tenemos que evaluar cuál es el precio del tabaco en España y qué se puede hacer para bajar el consumo", afirmó en la conferencia de prensa para presentar el Día Mundial sin Tabaco.

Haik Nikogosian, experto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que estaba sentado junto a Pastor, discrepó, una vez finalizado el acto: "No hay ninguna duda de que subir el precio es la mejor medida para disminuir el consumo. Un aumento del 10% disminuye un 5% el consumo de tabaco". España es el país de la Unión Europea con el tabaco más barato y, descontada la inflación, un paquete cuesta lo mismo que en los años setenta. Francia y Alemania han anunciado grandes subidas de impuestos del tabaco. Cuatro expertos consultados coincidieron con Nikogosian y citaron literatura científica a favor de un aumento de impuestos. Pastor, por su parte, afirmó que falta "un metaanálisis del efecto del precio".

El presidente del Comité para la Prevención del Tabaquismo, el médico especialista en salud pública Joan Ramón Villalbí, señaló que el precio es un factor fundamental en la prevención, pero matizó: "Subir los impuestos compete a todo el Gobierno, no sólo a Sanidad". El miércoles, una portavoz de Economía negó tajantemente que se fueran a tocar los impuestos del tabaco: "La política del Gobierno es no subir los impuestos".

La posición del Gobierno choca con lo escrito en el Plan Nacional de Prevención del Tabaquismo de Sanidad, que incluye "establecer medidas fiscales a nivel nacional de aumento del precio del tabaco" para prevenir la incorporación de nuevos fumadores, y con el convenio antitabaco auspiciado por la OMS y apoyado por España. En él, los países reconocen que "el precio y las medidas de impuestos son una forma efectiva e importante para reducir el consumo de tabaco [...], en especial entre los jóvenes". Sobre las diferencias entre su postura y el texto del convenio, Ana Pastor señaló: "La ministra de Sanidad no emite opiniones, se basa en los informes de los expertos".

Pastor explicó también que tiene previsto dirigirse a representantes de la industria del cine para proponer un regulación que evite la promoción del tabaco a través de sus películas. Además, apoyó la petición de la OMS de que las películas en las que se fume sean recomendadas para mayores de edad. En España mueren 55.000 personas al año por el tabaco.