Balance del viaje del voluntariado a Galicia
El fin de semana del puente de la Constitución cerca de mil estudiantes de las universidades públicas de Madrid viajamos a Galicia para colaborar en la retirada de fuel de las playas de la Costa da Morte. La iniciativa, llevada a cabo por representantes de estudiantes, tuvo mucho éxito y, pese al gran número de personas que participamos en la actividad y los problemas de organización que eso podía suponer, para todos fue una gran experiencia.
Los jóvenes demostramos nuestra capacidad de organización y que no dudamos a la hora de renunciar a nuestro tiempo libre ante situaciones críticas...
El fin de semana del puente de la Constitución cerca de mil estudiantes de las universidades públicas de Madrid viajamos a Galicia para colaborar en la retirada de fuel de las playas de la Costa da Morte. La iniciativa, llevada a cabo por representantes de estudiantes, tuvo mucho éxito y, pese al gran número de personas que participamos en la actividad y los problemas de organización que eso podía suponer, para todos fue una gran experiencia.
Los jóvenes demostramos nuestra capacidad de organización y que no dudamos a la hora de renunciar a nuestro tiempo libre ante situaciones críticas de esta dimensión. Por su parte, los habitantes de los municipios afectados hicieron todo lo posible para que los voluntarios nos sintiéramos como en nuestras propias casas. Y lo consiguieron: con mal tiempo, pero buena cara, los universitarios madrugábamos para trabajar, pero al final de la jornada recibíamos la recompensa: comida caliente, dulces y fiestas prácticamente improvisadas con la participación de los vecinos, e incluso del Ejército. La Delegación del Gobierno de Galicia y el comité organizador de la actividad hemos trabajado duro para encontrar alojamiento a todo el mundo, pero no estuvimos solos. Los rectorados y decanatos se encargaron de financiar los autobuses; además, hay que desta-
car la dedicación de los ayuntamientos y equipos organizadores de todas las localidades, así como la amabilidad que mostraron con todos los que acudimos a la zona. La coordinación de los trabajos fue, quizá, mejorable, pero es importante señalar que hubo disponibilidad de equipos para todos voluntarios y que la situación parecía evolucionar día a día.
Esperamos que iniciativas como ésta puedan seguir llevándose a cabo, con la colaboración de otros sectores de la sociedad, al menos hasta que se tome verdadera conciencia y se halle una solución al problema.