Ayuda a Galicia de la Comisión Europea

La Comisión Europea ha planteado a España una serie de opciones para que pueda utilizar fondos europeos para paliar las consecuencias del vertido de fuel procedente del Prestige. Bruselas recuerda que Galicia aún no tiene asignada o programada la mitad de los 2.300 millones de euros que le corresponden como fondos estructurales o regionales para el periodo 2000-2006.

También están pendientes de programación otros 6.000 millones del Fondo de Cohesión, adjudicado en este caso a toda España, para el mismo periodo.Fuentes de la Comisión señalaron ayer que aún está pendiente de recibi...

La Comisión Europea ha planteado a España una serie de opciones para que pueda utilizar fondos europeos para paliar las consecuencias del vertido de fuel procedente del Prestige. Bruselas recuerda que Galicia aún no tiene asignada o programada la mitad de los 2.300 millones de euros que le corresponden como fondos estructurales o regionales para el periodo 2000-2006.

También están pendientes de programación otros 6.000 millones del Fondo de Cohesión, adjudicado en este caso a toda España, para el mismo periodo.Fuentes de la Comisión señalaron ayer que aún está pendiente de recibir una respuesta concreta de las autoridades españolas para analizar posibles partidas concretas con que hacer frente a la catástrofe, pero que existen posibilidades de encontrar dinero.

Los fondos estructurales ofrecen posibilidades más abiertas. Bastaría con que el Gobierno gallego optara por dar prioridad a nuevos programas dedicados a mejorar las infraestructuras costeras para poder emplear en ello parte de los 2.300 millones de euros citados.

Usar el Fondo de Cohesión en este terreno es más complicado, porque debe ser utilizado sólo para programas de medio ambiente y transporte. Aún así, pueden dedicarse parte de los 6.000 millones de euros a proyectos de recuperación de costas.

Por último, Madrid y Bruselas también analizan la posibilidad de utilizar el Fondo de Solidaridad, dotado con 1.000 millones de euros y creado el pasado verano tras las inundaciones en Europa central. El fondo sólo puede ser usado en caso de "catástrofe natural", pero cabría una interpretación amplia y dedicar dinero a la limpieza de playas. Sólo cubriría, en el mejor de los casos, el 2,5% del coste total.