El BCE se reafirma en la previsión de inflación en torno al 2% para este año

Para lo que queda del año, el Banco Central Europeo (BCE) prevé una inflación en los 12 países de la zona euro que seguirá fluctuando con un incremento en torno al 2%, el nivel que la autoridad monetaria se ha propuesto garantizar. Los llamamientos, también políticos, para que el banco central baje los tipos de interés y así contribuya a una reactivación económica que se está retrasando bastante más de lo previsto habían aumentado en las últimas semanas.

Wim Duisenberg reconoció ayer que el crecimiento económico tan sólo volverá a acercarse al 2,5% durante el primer semestre del próximo...

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Para lo que queda del año, el Banco Central Europeo (BCE) prevé una inflación en los 12 países de la zona euro que seguirá fluctuando con un incremento en torno al 2%, el nivel que la autoridad monetaria se ha propuesto garantizar. Los llamamientos, también políticos, para que el banco central baje los tipos de interés y así contribuya a una reactivación económica que se está retrasando bastante más de lo previsto habían aumentado en las últimas semanas.

Wim Duisenberg reconoció ayer que el crecimiento económico tan sólo volverá a acercarse al 2,5% durante el primer semestre del próximo año. Lo que supone un cambio respecto a que se logrará a finales del año 2002, como se creía hasta ahora.

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El presidente del Banco Central Europeo fue muy claro en su rechazo a relajar los objetivos del Pacto de Estabilidad, que establece que ningún país miembro de la Unión Europea puede superar un déficit público del 3% del producto interior bruto (PIB).

'Oigo voces de que hay que cambiar las reglas de juego. El Banco Central Europeo, sin embargo, se mantiene en su políti-ca y dice: 'No cambiéis las reglas cuando apenas habéis comenzado a jugar', manifestó Duisenberg.

Como para recordar que, en su opinión, no hay argumento que valga en este sentido, Wim Duisenberg restó importancia a las consecuencias de las inundaciones que afectaron a Alemania, Austria y la República Checa durante el mes pasado.

'El impacto macroeconómico de las riadas debería ser limitado y sin efectos duraderos', manifestó, antes de pedir que los afectados asuman los correspondientes costes no con un nuevo endeudamiento, sino a través de la reestructuración de sus Presupuestos.

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