Reportaje:

La catedral de las herboristerías

Las hierbas, el vegetarianismo, la agricultura biológica o la comida macrobiótica convergen en una tienda de Valencia que ofrece una gran muestra de productos de comida sana

A José Navarro le gusta definirse como herbolario -persona que se dedica a recoger hierbas y plantas medicinales para venderlas, según la Real Academia de la Lengua-. Y lo hace con orgullo. Tanto como el que destila cuando se refiere a sus antecedentes familiares, que se remontan cientos de años atrás. Asegura que desde 1771 existen referencias de antepasados que ya se dedicaron a la venta de hierbas con fines curativos. 'Y siempre a 200 metros a la redonda' de su ubicación actual, en la calle de Arzobispo Mayoral, detrás del Ayuntamiento de Valencia.

Si para un número creciente de gent...

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A José Navarro le gusta definirse como herbolario -persona que se dedica a recoger hierbas y plantas medicinales para venderlas, según la Real Academia de la Lengua-. Y lo hace con orgullo. Tanto como el que destila cuando se refiere a sus antecedentes familiares, que se remontan cientos de años atrás. Asegura que desde 1771 existen referencias de antepasados que ya se dedicaron a la venta de hierbas con fines curativos. 'Y siempre a 200 metros a la redonda' de su ubicación actual, en la calle de Arzobispo Mayoral, detrás del Ayuntamiento de Valencia.

Si para un número creciente de gente la herboristería, el vegetarianismo, la comida macrobiótica -dietas basadas en arroces integrales, legumbres y verduras, con una pequeña cantidad de alimentos fermentados, frutos secos, semillas y frutas- o simplemente la alimentación sana se ha convertido en una religión, la tienda de José Navarro -y sus sucursales abiertas recientemente en toda la Comunidad- probablemente sea la catedral de referencia de todas estas personas en Valencia.

Asegura que desde 1771 hay referencias de familiares suyos que ya vendían hierbas
Tiene también carne de vacuno con garantía de que las vacas han pastado sueltas

Su gerente destaca que en ellas se puede encontrar todo aquello relacionado con las plantas medicinales y la alimentación natural. Existe una amplia oferta de productos de agricultura biológica -sin pesticidas o insecticidas- pero también otros de origen animal que se han mantenido al margen de los procesos de engorde industriales. Entre ellos, huevos de gallinas que se han alimentado de forma natural, o carne de vacuno con garantía de que las vacas pastan sueltas y que sólo han crecido a partir de hierba y cereales que no hayan sido tratados con plaguicidas, ni fertilizantes químicos, entre otras condiciones. Además, en la sección de lácteos de la tienda se pueden comprar yogures y quesos de la marca Mas Claperol, procedentes de una pequeña granja situada en Sant Feliu de Pallerols (Girona) que cuenta con 28 vacas, y es una de las cuatro de España que fabrica yogur ecológico. Navarro estuvo cuatro años detrás del dueño 'dándole la llanda' hasta que al final consiguió que le suministrara estos productos.

También cuenta con una importante oferta de la llamada nueva alimentación, basada en el tofú, un producto básico de la alimentación en el Extremo Oriente que se obtiene a partir de alubias de soja, remojadas y reducidas a puré; o de algas. Pero la oferta no se limita a estos productos, hay también cosmética natural -sin conservantes y en gran parte comestible-, libros o ropa.

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Recién llegado de la Feria de Múnich de productos bio -'es como la del mueble en Valencia', comenta admirado-, Navarro presume de estar siempre a la última y para demostrarlo alude a una de las últimas novedades en sus estantes. Se trata de una marca de pan integral que prepara distintas variedades en función del grupo sanguíneo de los clientes.

Lejos quedan los tiempos en los que la actividad del Herbolario J. Navarro se ceñía a la venta de plantas medicinales. Así fue hasta hace unos 25 años, cuando haciendo frente a los recelos de su madre, comenzó a introducir nueva mercancía. Primero fue el pan integral. Entonces recuerda que algún panadero se negó a hacerlo ya que recordaba al pan negro de la posguerra: 'Me decía que si los clientes se enteraban de que preparaba pan negro se le acababa el negocio, que eso era comida para cerdos'. Con la transición, hubo una pequeña recesión. Lo de las herboristerías 'sonaba a antiguo' y la gente dejó de acudir a estos establecimientos, aunque fue durante un breve periodo de tiempo. Ahora, el sector vive una edad de oro gracias al interés que despierta la alimentación natural.

En la tienda de José Navarro trabajan 22 personas, incluyendo a cuatro farmacéuticas. Y ello sin contar a los que trabajan en las franquicias que ha abierto en la calle de Serrería de Valencia, en Torrent, L'Eliana, Vinaròs, Elda, Calpe y Gandia, o la marca blanca que ha puesto en marcha. Pese a todo, quizás la mayor muestra de su crecimiento es la página web, que comparte el nombre de su marca blanca www.terraverda.com, en la que incluso se puden hacer pedidos.

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