EL CONGRESO DEL PSE

El PSE defenderá listas conjuntas si el acoso terrorista le impide ir solo en las municipales

Rechazada una enmienda de Elorza para exigir al Estado que respete los acuerdos de los vascos

La primera tarea de envergadura a la que tendrá que hacer frente la nueva dirección del PSE-EE es la conformación de las listas en los 250 municipios vascos para las proximas elecciones locales. Una de las dos únicas enmiendas que llegaron ayer al plenario hacía mención a la presentación de listas. Finalmente, se aprobó una transaccional en la que se apoyaba concurrir en solitario y elaborar candidaturas conjuntas con 'todas las fuerzas democráticas' en aquellas localidades en que la amenaza terrorista haga imposible a los partidos acosados por ETA confeccionar sus listas por separado.

...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La primera tarea de envergadura a la que tendrá que hacer frente la nueva dirección del PSE-EE es la conformación de las listas en los 250 municipios vascos para las proximas elecciones locales. Una de las dos únicas enmiendas que llegaron ayer al plenario hacía mención a la presentación de listas. Finalmente, se aprobó una transaccional en la que se apoyaba concurrir en solitario y elaborar candidaturas conjuntas con 'todas las fuerzas democráticas' en aquellas localidades en que la amenaza terrorista haga imposible a los partidos acosados por ETA confeccionar sus listas por separado.

Más información

El grueso de las 850 enmiendas presentadas por las agrupaciones a la ponencia elaborada por la gestora que ha presidido Ramón Jáuregui fueron rechazadas o transaccionadas en las dos comisiones que trabajaron hasta altas horas de la madrugada de ayer. Su actividad se prolongó más de lo previsto debido a la falsa alarma de bomba que se produjo a la 1.20 de la madrugada y obligó a interrumpir momentáneamente los trabajos de los delegados.

La ponencia no tuvo ninguna modificación de fondo, ya que las dos enmiendas de sustitución -ambas con un claro fondo ideológico y basadas en el documento elaborado en su día por Nicolás Redondo para la Conferencia Política- propuestas por el sector de Totorika no prosperaron.

En una de las comisiones se produjo un debate importante en torno a la respuesta que debía dar el partido ante 'la falta de democracia plena' en Euskadi, que impide a determinados partidos no poder concurrir en igualdad de condiciones y confeccionar sus listas por el acoso terrorista. En este capítulo se presentaron tres enmiendas: una, defendida por la agrupación del barrio bilbaíno de Deusto, en la que se abogaba porque el PSE no se presentara a los próximos comicios locales y denunciara la falta de libertad ante los organismos de la Unión Europea (UE). Otra, en la que se defendía presentarse a los comicios y luego dimitir en bloque -propuesta de Llodio-, y finalmente la presentación de listas conjuntas, planteada por Nanclares de Oca.

En los días previos al congreso, el propio Ramón Jáuregui aseguró que este asunto debía ser trasnsaccionado en el congreso, porque algunas propuestas eran excesivamente dramáticas. La importancia de este asunto, vital probablemente en los próximos meses ante el redoble de la actividad terrorista de ETA contra los ediles del PSE y del PP, devino en un debate profundo e intenso. El líder de los socialistas alaveses, Javier Rojo, entre otros, criticó la propuesta de dimisión masiva de ediles y propuso que el PSE concurra con listas conjuntas en aquellos municipios en los que resulte imposible confeccionar candidaturas para las elecciones municipales. La comisión aprobó finalmente una enmienda transaccional, que recogía el texto de Rojo, aunque incorporando el matiz de que las listas conjuntas se deberán proponerse a 'todos los partidos democráticos'. De esta manera se rehúye la oferta del PP de ir juntos en los municipios problemáticos, para involucrar al conjunto de las formaciones en la respuesta a un situación excepcional.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, defendió una de las dos enmiendas que llegó a pleno, la que hacía referencia al ámbito vasco de decisión, aunque sin nombrarlo directamente. El regidor donostiarra defendió 'un diálogo político' entre los partidos vascos, 'desde el respeto a la legalidad política e institucional vigente', para exigir que 'aquello en lo que los partidos vascos -sea mucho o poco- mediante el consenso y sin ningún tipo de imposiciones, nos pongamos de acuerdo, sea respetado por los poderes públicos del Estado'. La enmienda, con un espíritu que se asemeja al llamado ámbito vasco de decisión que defendienden los nacionalistas vascos, no prosperó.

La segunda y última enmienda que llegó a pleno fue defendida por un miembro de Juventudes Socialistas. El texto hacía una defensa radical de los logros y las potencialidades que tenía el Pacto de Ajuria Enea, firmado en 1988 por todas las fuerzas vascas salvo HB. Y consideraba excluyente tanto el Pacto de Lizarra, firmado en septiembre de 1998, que precedió a la última tregua de ETA, como el Pacto Antiterrorista, firmado por el PSOE y el PP. La enmienda criticaba el preámbulo del Pacto Antiterrorista porque descalifica al PNV, algo que ya ha sido discutido por el sector del socialismo que quiere integrar al nacionalismo en un pacto que el PSOE considera básico contra ETA. Y censuraba el resto del acuerdo por 'no tener incentivos para atraer al nacionalismo a la senda estatutaria, y el Pacto de Lizarra, por 'soberanista y excluyente'. Sin embargo, la enmienda no llegó a votarse porque sus promotores la retiraron.

Archivado En