La OTAN se resiste a traspasar a la Unión Europea el mando de su misión en Macedonia
La Alianza pide a los Quince que abandonen sus diferencias si quieren sellar un acuerdo
La OTAN ha lanzado un jarro de agua fría a los deseos de la UE de asumir este verano el mando militar de la actual misión de paz en Macedonia, desplegada el pasado agosto y que cuenta actualmente con unos 700 soldados, la mayoría alemanes. 'No hay problemas en principio, pero los europeos tendrán que solucionar antes muchas cuestiones técnicas', declaró ayer un portavoz de la Organización Atlántica. Una alta fuente militar cuestionó el día anterior la viabilidad de tal proyecto, defendido el mes pasado en Cáceres por el alto representante, Javier Solana.
El proyecto no cuenta aún con el...
La OTAN ha lanzado un jarro de agua fría a los deseos de la UE de asumir este verano el mando militar de la actual misión de paz en Macedonia, desplegada el pasado agosto y que cuenta actualmente con unos 700 soldados, la mayoría alemanes. 'No hay problemas en principio, pero los europeos tendrán que solucionar antes muchas cuestiones técnicas', declaró ayer un portavoz de la Organización Atlántica. Una alta fuente militar cuestionó el día anterior la viabilidad de tal proyecto, defendido el mes pasado en Cáceres por el alto representante, Javier Solana.
El proyecto no cuenta aún con el pleno respaldo de todos los países miembros de la Unión. Un portavoz de la Organización Atlántica advirtió de la necesidad de que los Quince salden sus propias diferencias, en referencia a Grecia y su litigio con Turquía, para sellar finalmente el acuerdo de cooperación con la OTAN que les permita acceder a la planificación de la Alianza.
Mucho más contundente fue el martes una alta fuente militar atlántica, que expresó bastantes reservas de que el traspaso de la misión pueda realizarse el próximo junio como insinuó Solana en Cáceres en la reunión informal de ministros de Exteriores de la UE. 'Sería una buena idea si hubiera los procedimientos adecuados', manifestó la fuente en un encuentro con varias agencias de prensa al subrayar la ausencia de una cadena de mando europea para dirigir la operación.
La UE carece de estructuras de planificación operativas para realizar una misión y por ahora debe recurrir a las de la OTAN. Los Quince declararon operativa el pasado diciembre en la cumbre de Laeken, más sobre el papel que sobre la realidad, su política de seguridad y defensa, que contempla la creación de una fuerza de reacción rápida (60.000 soldados) para misiones humanitarias y de gestión de crisis a partir del año próximo. Los ministros de Exteriores acordaron en Cáceres que la UE asuma la misión de la policía de la ONU en Bosnia (alrededor de medio millar de efectivos) a partir de enero próximo y se declararon dispuestos a relevar a la OTAN de Macedonia, aunque esta idea, sostenida firmemente por España, cuenta con bastantes reservas de parte de Alemania y el Reino Unido.
La operación macedonia, bautizada en inglés Amber Fox (zorro ámbar), fue lanzada en agosto de 2001 a petición de las autoridades de Skopje con el objetivo de supervisar el desarme de la guerrilla y dar protección a los dos centenares de observadores civiles internacionales. Su mandato se ha ido renovando desde entonces cada tres meses y su volumen ha pasado de casi 2.500 en sus primeros momentos, la gran mayoría británicos, a unos 700 soldados actualmente, alemanes en su mayoría, pero también franceses, españoles, griegos, portugueses y polacos.
La UE está tratando desde hace un año de hacer eficaces sus capacidades de defensa, pero expertos militares sostienen que los Quince tendrán que redoblar esfuerzos y presupuestos en transporte estratégico, comunicaciones y logística.