Los catalanes responden a la falta de sangre con 1.000 donaciones en un día
La respuesta de la ciudadanía a la falta de sangre en los hospitales públicos ha sido masiva. Ayer se realizaron en Cataluña más de un millar de donaciones, un hecho sin precedentes en plena Navidad. Unas 600 bolsas de sangre fueron recogidas por las 11 unidades móviles que recorrieron el territorio de Cataluña y las otras 400 se donaron en los cinco grandes hospitales: el Clínic, Bellvitge, Vall d'Hebron, Sant Pau y Germans Trias i Pujol.
Joan Profitós, presidente de la Comisión Asesora para la Donación de Sangre del Departamento de Sanidad, se felicitó ayer por la reacción de la po...
La respuesta de la ciudadanía a la falta de sangre en los hospitales públicos ha sido masiva. Ayer se realizaron en Cataluña más de un millar de donaciones, un hecho sin precedentes en plena Navidad. Unas 600 bolsas de sangre fueron recogidas por las 11 unidades móviles que recorrieron el territorio de Cataluña y las otras 400 se donaron en los cinco grandes hospitales: el Clínic, Bellvitge, Vall d'Hebron, Sant Pau y Germans Trias i Pujol.
Joan Profitós, presidente de la Comisión Asesora para la Donación de Sangre del Departamento de Sanidad, se felicitó ayer por la reacción de la población, pero advirtió de que no deben lanzarse las campanas al vuelo. 'Si este ritmo se mantuviera tres o cuatro días más, habríamos recuperado la normalidad', aseguró.
Y la normalidad es que en los hospitales públicos de Cataluña haya unas existencias de 5.000 bolsas de sangre. El viernes quedaban 2.700 bolsas y los responsables de Sanidad lanzaron una voz de alarma que la ciudadanía parece haber escuchado. Solamente en las dependencias del hospital de Vall d'Hebron, el mayor banco se sangre de Cataluña, se realizaron ayer 110 donaciones, una cifra muy próxima al récord registrado en ese centro.
El Clínic, al límite
Y ayer trascendió que el hospital Clínic de Barcelona se encontraba en una situación límite en cuanto a reservas de sangre. Tanto que si, por ejemplo, se hubieran producido tres o cuatro accidentes de gravedad simultáneos, no se habría podido atender a debidamente a los afectados, según explicó Joan Profitós de forma más que ilustrativa.
Las reservas de sangre en los hospitales públicos de Cataluña eran tan bajas hace tan sólo dos días que Sanidad advirtió a la población de que únicamente quedaba sangre para una semana y de que si la situación no cambiaba se deberían anular algunas intervenciones quirúrgicas que se había previsto realizar a partir del 7 de enero. Esa situación límite se ha superado ya, pero Sanidad insiste en que se está por debajo de los niveles de existencias de sangre propios de esta época. Y eso sin contar que el virus de la gripe no se ha extendido todavía entre la población y que los servicios de urgencia no han registrado una afluencia masiva de pacientes, algunos de los cuales quedan ingresados por complicaciones en su estado de salud y requieren una transfusión sanguínea.
A la vista de la situación de hace 48 horas, los grandes hospitales de Cataluña decidieron ir directos al grano y telefonear a algunos de los cerca de 70.000 donantes que hay en Cataluña. Pero nadie esperaba una respuesta como la de ayer del resto de la ciudadanía.