Humedal en peligro
Las Vegas de Zuloko-Ibarreta, en Barakaldo, constituyen el último resto de los que fueron los extensos humedales del estuario del Nervión en su desembocadura. Son también el último espacio natural próximo a un centro urbano en una comarca densamente poblada como es la Margen Izquierda del Nervión. Ahora se pretende desecar y hacer desaparecer este espacio natural para especular con sus suelos, urbanizando la zona e instalando la mayor superficie comercial del norte de la península, en un proyecto liderado por la multinacional del mueble Ikea. Y ello se pretende hacer con la complicidad de vari...
Las Vegas de Zuloko-Ibarreta, en Barakaldo, constituyen el último resto de los que fueron los extensos humedales del estuario del Nervión en su desembocadura. Son también el último espacio natural próximo a un centro urbano en una comarca densamente poblada como es la Margen Izquierda del Nervión. Ahora se pretende desecar y hacer desaparecer este espacio natural para especular con sus suelos, urbanizando la zona e instalando la mayor superficie comercial del norte de la península, en un proyecto liderado por la multinacional del mueble Ikea. Y ello se pretende hacer con la complicidad de varias instituciones responsables de su conservación y regeneración: El Ayuntamiento de Barakaldo, que ya ha aprobado un plan parcial redactado y modificado a la medida de las necesidades de Ikea; la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno vasco, que después de retirar los suelos contaminados con residuos de lindane de la zona se niega a su recuperación natural y a incluir el humedal en el Catálogo de Zonas Húmedas del País Vasco; la Dirección General de Costas, que desde 1.988 viene retrasando la realización del deslinde del dominio público marítimo-terrestre y se desentiende de sus obligaciones de protección en una zona de influencia mareal y, por tanto, sometida a la Ley de Costas.
En Barakaldo, Ekologistak Martxan y la Plataforma Ezpitsua, formada por grupos ecologistas locales y otras entidades ciudadanas, llevan dos años denunciando estas maniobras y exigiendo la conservación y recuperación natural del humedal. Hasta ahora lo único que han conseguido ha sido detenciones (más de 20) y una docena de juicios por realizar acciones simbólicas como encadenarse en las obras, subirse a las excavadoras o colgarse de los árboles.
Por ello, Ecologistas en Acción, en colaboración con miembros de la Plataforma Ezpitsua y de Ekologistak Martxan, realizará mañana en Madrid acciones de denuncia ante la Dirección General de Costas y la multinacional Ikea.