KLM se suma a la oleada de despidos en el sector aéreo al recortar 2.500 empleos
La compañía holandesa reducirá un 15% los vuelos y bajará los sueldos de sus trabajadores
La crisis desatada por los atentados de Estados Unidos en el sector aeronáutico ha llegado a la holandesa KLM. La empresa ha anunciado el despido de 2.500 trabajadores, una disminución del 15% de los vuelos en los próximos meses y un recorte de los sueldos.
Los despidos en KLM se suman a los más de 140.000 empleos que se perderán en el sector si se cumplen los planes de reducción de plantilla anunciados por gigantes del negocio aeronáutico como las estadounidenses American Airlines (20.000 empleos), United Airlines (20.000), Air Canadá ( 9.000) y un largo etcétera que pasa también por e...
La crisis desatada por los atentados de Estados Unidos en el sector aeronáutico ha llegado a la holandesa KLM. La empresa ha anunciado el despido de 2.500 trabajadores, una disminución del 15% de los vuelos en los próximos meses y un recorte de los sueldos.
Los despidos en KLM se suman a los más de 140.000 empleos que se perderán en el sector si se cumplen los planes de reducción de plantilla anunciados por gigantes del negocio aeronáutico como las estadounidenses American Airlines (20.000 empleos), United Airlines (20.000), Air Canadá ( 9.000) y un largo etcétera que pasa también por empresas europeas como Lufthansa, Swissair, Alitalia e incluso la española Iberia.
La compañía holandesa KLM, que tiene en la actualidad 28.000 empleados, espera reducir sus gastos con despidos, menos vuelos y medidas complementarias, hasta el próximo 1 de abril, en unos 60 millones de euros, unos 10.000 millones de pesetas. Los inversores reaccionaron positivamente a la noticia y las acciones de la compañía aérea subieron 1,72%, hasta situarse en 8,85 euros.
Desde que los aviones pilotados por terroristas suicidas se precipitaron el día 11 de septiembre contra las Torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono, en Washington, la holandesa KLM ha sufrido unas pérdidas de 50 millones de euros. Tan sólo entre el 11 y el 15 de septiembre la compañía holandesa vio cómo se reducía la ocupación de sus aviones un 33%. Prácticamente la cuarta parte de su flota tuvo que permanecer en los hangares.
Para dar ejemplo, Leo van Wijk, presidente de la compañía, anunció ayer, durante la presentación del plan de ajuste, que reducirá su sueldo y el del resto del consejo de administración un 15% a partir del próximo mes. Los cargos medios experimentarán una rebaja de su salario del 7%. Los demás trabajadores también tendrán que apretarse el cinturón: en diciembre recibirán menos paga extraordinaria y no podrán contar con el incremento de sueldo del 2% negociado con los sindicatos para 2002. Los viajeros de la clase turista también notarán cambios: en los vuelos cortos no recibirán el periódico de forma gratuita.
Las líneas hacia EE UU, que KLM operaba junto a la americana Northwest Airlines, se van a reducir de 188 a 163 a lo largo de este mes y también volarán menos aparatos hacia Oriente Próximo. En Europa, KLM tiene previsto reducir el número de vuelos un 8%. En algunos casos las naves más grandes permanecerán en tierra y serán sustituidas por aparatos de menor capacidad.
Según Van Wijk, los despidos no van a tener consecuencias graves. De los 2.500 empleos que van a desaparecer, la mitad corresponderán a contratos temporales.
En este contexto de crisis en el sector, las compañías estadounidenses y europeas parecen tomar medidas divergentes. Mientras Alitalia anunció ayer una subida de tarifas de 1.000 pesetas por trayecto a partir del 8 de octubre, la estadounidense Northwest anunciaba 'tarifas especiales' y más descuentos hasta el 15 de marzo de 2002 en sus rutas internacionales.