Un guardia civil se suicida tras matar con su arma a su ex novia y dos familiares de ésta

Un guardia civil de 27 años mató ayer en Torredelcampo (Jaén) a la que hasta hace un mes había sido su novia, a la hermana de ésta y a su madre con su arma reglamentaria en el domicilio familiar. Una vez cometidos los asesinatos se suicidó. Miguel Ángel la Rosa, de 27 años, entró en la casa unifamiliar situada en la carretera de Santa Ana a las 14.00 y disparó contra las tres mujeres, que se encontraban esperando al resto de la familia para comer. El único superviviente fue un bebé de un año al que la Policía Local encontró escondido bajo una mesa camilla.

Las fallecidas son María José ...

Un guardia civil de 27 años mató ayer en Torredelcampo (Jaén) a la que hasta hace un mes había sido su novia, a la hermana de ésta y a su madre con su arma reglamentaria en el domicilio familiar. Una vez cometidos los asesinatos se suicidó. Miguel Ángel la Rosa, de 27 años, entró en la casa unifamiliar situada en la carretera de Santa Ana a las 14.00 y disparó contra las tres mujeres, que se encontraban esperando al resto de la familia para comer. El único superviviente fue un bebé de un año al que la Policía Local encontró escondido bajo una mesa camilla.

Las fallecidas son María José Moral Miranda, de 24 años y ex novia del asesino; su hermana Luisa, de 25 años; y la madre de ambas, Dolores Miranda, de 45. Miguel Angel La Rosa utilizó para el triple crimen su arma reglamentaria.

Los vecinos y familiares de las mujeres fallecidas recordaron ayer que hacía un mes que la pareja se había separado. Pero hace una semana Miguel Angel La Rosa acudió a ver a su ex novia y la amenazó. Nadie entonces dio importancia al hecho porque, según aseguraron en Torredelcampo, no habían tenido noticias de que previamente se hubiesen producido hechos violentos entre ambos.

Los cadáveres de las mujeres fueron encontrados en la vivienda. El cuerpo de la madre se hallaba en un salón situado junto al acceso a la casa, y el de las jóvenes en el pasillo. En el quicio de la puerta encontraron al guardia.

La señal de alarma la dio a la tres de la tarde un vecino que acudió a la Policía Local después de observar parte de un cuerpo saliendo por la puerta. Divisó unos pies inmóviles y relacionó de inmediato esa imagen con los disparos que se habían oído minutos antes y que había identificado como fuegos artificiales o petardos. Cuando la Policía Local entró en la vivienda se encontró con los cuatro cuerpos y con los llantos del niño que había permanecido escondido.

Los servicios de emergencias sanitarios no pudieron hacer nada por las víctimas cuando llegaron hasta la vivienda después de ser avisados por la Policía Local.

Ninguno de los vecinos que ayer por la tarde se arremolinaban en las inmediaciones del lugar en el que ocurrieron los hechos escuchó discusiones previas a los disparos. Las primeras investigaciones de la Guardia Civil apuntan a que el joven llegó a la casa en su vehículo recién estrenado -un Audi 3 con matrícula de Jaén- y disparó contra las mujeres, según se las fue encontrando, sin cruzar palabra y sin peleas previas.

Miguel Angel La Rosa residía en la cercana localidad de Alcaudete y estaba destinado en la unidad de Tráfico de Elizondo (Navarra). Durante estos días se encontraba disfrutando de un periodo de vacaciones. Su familia está relacionada con la Guardia Civil, de la que también forman parte su padre y su hermano. El primero se encuentra destinado en el municipio jienense de Alcalá la Real y el hermano en Castillo de Locubín.

Fuentes de la subdelegación del Gobierno en Jaén indicaron que este agente 'no tenía ningún tipo de problema y aparentemente era una persona normal y un guardia civil que nunca había tenido ningún tipo de conflicto, al menos dentro de la Guardia Civil'. Fuentes del instituto armado confirmaron que el arma utilizada era la reglamentaria.

Esconderse del horror

El alcalde de Torredelcampo, Blas Sabalete, fue una de las primeras personas en desplazarse hasta el lugar del multiple asesinato: 'Ha sido horrible; yo llegué cuando sacaban al niño pequeño en brazos. Estaba tan asustado que debió meterse debajo de la mesa cuando empezó a escuchar los disparos y no se atrevió a salir hasta que fueron a sacarle', comentó el responsable municipal.

Ni el bébe de un año ni su madre tenían que haber estado en ese momento en la vivienda de la carretera que lleva al monte de Santa Ana. El alcalde explicó que ambos tienen vivienda en otro punto de la localidad y que se habían desplazado hasta la casa de la carretera sólo para hacer una visita. 'La mala suerte hizo que estuviesen allí también cuando llegó el muchacho. Nadie entiende qué es lo que ha pasado', comentaba el alcalde.

Los familiares de las fallecidas se enteraron de lo ocurrido a través del teléfono. El padre y esposo de las víctimas, un hombre de 50 años, posee una empresa de construcción y se encontraba trabajando en varias obras en Andújar y en la Costa del Sol. Con él estaba uno de sus hijos y el marido Luisa Moral, también asesinada.

El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Jaén, Pedro López Jiménez, fue el encargado de acudir a Torredelcampo -localidad situada a unos 20 kilómetros al oeste de Jaén y de unos 13.000 habitantes- y será el que instruya las diligencias. Los cuerpos de los cuatro fallecidos fueron trasladados a lo largo de la tarde hasta el tanatorio de Jaén capital, donde estaba previsto realizarles las correspondientes autopsias. Será el análisis forense el que determine la cantidad de balas que recibió cada cuerpo y el lugar en el que recibieron los disparos.

La familia de las tres mujeres tenía previsto ayer instalar la capilla ardiente en una de sus viviendas de la localidad, mientras que el joven será trasladado hasta Alcaudete, donde podría ser enterrado en la mañana de hoy.