El gasto 'per capita' sigue bajo pese al crecimiento de la economía

Un 64% de los hogares considera inadecuado el momento para adquirir nuevos gastos

La Comunidad fue el año pasado una de las autonomías con mayor crecimiento económico. Las tres provincias vieron incrementado su PIB un 4,4% en términos reales frente al 4,1% en que avanzó la economía española. Desde 1995 hasta el año pasado, cinco ejercicios en total, la Comunidad ha acumulado un aumento de su riqueza del 23% frente al 20,2% en que lo hizo la estatal. Más dinámicas que la valenciana fueron las autonomías de Canarias, con un crecimiento de su PIB del 24%, Murcia y Madrid, con un 23,1% cada una. Según el INE, el peso relativo de cada comunidad autónoma en el PIB español 'no ha...

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La Comunidad fue el año pasado una de las autonomías con mayor crecimiento económico. Las tres provincias vieron incrementado su PIB un 4,4% en términos reales frente al 4,1% en que avanzó la economía española. Desde 1995 hasta el año pasado, cinco ejercicios en total, la Comunidad ha acumulado un aumento de su riqueza del 23% frente al 20,2% en que lo hizo la estatal. Más dinámicas que la valenciana fueron las autonomías de Canarias, con un crecimiento de su PIB del 24%, Murcia y Madrid, con un 23,1% cada una. Según el INE, el peso relativo de cada comunidad autónoma en el PIB español 'no ha sufrido grandes alteraciones de 1999 a 2000', pero sí se aprecian cambios de importancia si se amplía el periodo de cómputo a los últimos cinco años.

La Comunidad de Madrid ha sido la que más ha aumentado su participación relativa sobre el conjunto de la economía estatal. Representa un 17,19% del total y ha avanzado desde 1995 en 0,40 puntos. La siguiente ha sido la Comunidad Valenciana, que con un 9,67% (no alcanza el 10% que siempre se le atribuye) ha mejorado su posición en un 0,22%. En tercer lugar se ha situado Andalucía, que representa un 13,57% y mejora su posición 0,16 puntos. Los cambios más notables en este periodo se resumen en que Murcia ha superado al Principado de Asturias y a las Islas Baleares, mientras el resto de las posiciones permanecen igual. La valenciana ocupa el cuarto lugar en su participación relativa en el PIB español, tras Cataluña, Madrid y Andalucía. Cataluña sigue siendo la que más aporta, si bien su posición ha empeorado ligeramente en el último quinquenio.

A pesar de estos avances, la Comunidad continúa en el tercer grupo de autonomías españolas en PIB per capita, con rentas medias que oscilan entre el 85 y el 100% de la media española. Siete comunidades están por encima de la media estatal -Madrid (134), Navarra (125), el País Vasco (122), Cataluña (121) y Baleares (118). El segundo grupo, con una renta de entre el 100 y el 115% de la media, lo integrarían Aragón y La Rioja, y el tercer grupo, en el que se encontraría la Comunidad Valenciana, lo compondrían, además, Castilla y León, Asturias, Cantabria y Canarias.

Los economistas valoran notablemente el crecimiento acumulado por el territorio valenciano durante esta reciente época de bonanza económica. La única objección a este aumento de la riqueza económica es su posterior distribución por persona. De acuerdo con las cifras publicadas en el primer trimestre de 2001, el gasto medio por persona en la Comunidad se situó en 274.891 pesetas, unas 4.000 pesetas por debajo del gasto medio español. En este ránking concretamente, la posición de los valencianos, en cuanto a gasto per capita, cae hasta el puesto número 12 por comunidades autónomas.

Otro elemento que corroborar la escasez de optimismo de los valencianos es el grado de dificultad que los hogares valencianos tienen para llegar a fin de mes. Los datos más recientes, también de los tres primeros meses de este año, son reveladores. Un 9% de las familias valencianas confiesan al INE que llegan con mucha dificultad a final de mes frente a un 2,2% que asegura que llega con mucha facilidad. En cuanto a las posibilidades de ahorro, más de la mitad de los valencianos (un 54,7%) asegura que sus niveles de renta no le permiten dedicar dinero al ahorro o dedican muy poco frente a un 45% que afirma que sí puede ahorrar. En esta ocasión, la situación valenciana es mejor que la media española donde casi un 62% dice que no puede ahorrar y un 38% que sí.

Cae la confianza

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La confianza de los hogares valencianos se resquebraja cuando se les interroga sobre si consideran el momento actual adecuado para realizar compras importantes, a excepción de la adquisición de la vivienda. A esta pregunta, un 14% de los encuestados considera que sí es un momento adecuado frente a un aplastante 62%, que considera la situación poco favorable. Un 23% es de la opinión de que no es el momento adecuado pero tampoco se puede considerar malo. Cae cerca del 5% el optimismo, por llamarlo de alguna manera de los valencianos en comparación con el mismo trimestre del año pasado. Sólo los gallegos son más pesimistas que los valencianos a la hora de responder a esta pregunta.

El INE atribuye , precisamente al comportamiento del gasto familiar la desaceleración del gasto en consumo final durante el primer trimestre de este ejercicio. Entre los motivos de la desaceleración se encuentran la caída en el ritmo de creación de empleo y los salarios y unos 'menores y volátiles rendimientos mobiliarios'. El consumo colectivo de las Administraciones Públicas también ha contenido su crecimiento, debido a los salarios de los funcionarios y a la moderación de las compras de estas administraciones.

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