La detección de la peste en Titaguas obliga a sacrificar otros 10.000 cerdos

La peste porcina se extiende por Los Serranos. Ayer, el Laboratorio de Referencia de Valdeolmos confirmó la enfermedad en dos granjas de Titaguas. Una ratificación que supondrá no sólo el sacrificio de los 1.400 animales de las dos explotaciones afectadas sino de otros 10.000 (7.000 según la Consejería de Agricultura) de las 14 granjas situadas en un kilómetro. Estas cifras unidas a los 25.000 cerdos eliminados en Alpuente (230 en Vilamarxant), y a los 6.700 que se están sacrificando en las dos localidades afectadas, supondrán la eliminación del 41% de la cabaña porcina de Los Serranos, de 100...

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La peste porcina se extiende por Los Serranos. Ayer, el Laboratorio de Referencia de Valdeolmos confirmó la enfermedad en dos granjas de Titaguas. Una ratificación que supondrá no sólo el sacrificio de los 1.400 animales de las dos explotaciones afectadas sino de otros 10.000 (7.000 según la Consejería de Agricultura) de las 14 granjas situadas en un kilómetro. Estas cifras unidas a los 25.000 cerdos eliminados en Alpuente (230 en Vilamarxant), y a los 6.700 que se están sacrificando en las dos localidades afectadas, supondrán la eliminación del 41% de la cabaña porcina de Los Serranos, de 100.000 cerdos. El alcalde de Titaguas, Ramiro Rivera, pidió ayer ayudas a los ganaderos y explicó que ha mantenido una reunión con la principal integradora que opera en el pueblo, que se ha comprometido a asumir el coste de los animales sacrificados.

Ahora la preocupación apunta también hacia Tuéjar, localidad vecina de Titaguas y de Alpuente, situada dentro del cordón de vigilancia epidemiológica de 10 kilómetros alrededor de los brotes detectados y en la que existe una importante cabaña porcina. En concreto, Túejar tiene entre 50 y 55 explotaciones ganaderas y unos 27.000 cerdos. Su alcalde, Delfín Martínez aseguraba ayer que la localidad vive una 'incertidumbre grandísima'. 'Por el momento no la tenemos [peste porcina], pero mañana ya veremos', comentó.

El desconcierto en Los Serranos ante la evolución de los acontecimientos empieza a afectar a la normalidad de algunos pueblos. Así, por ejemplo, el alcalde de Aras de Alpuente, que colinda por el norte con los dos pueblos afectados, Juan Carlos Mora, expresaba ayer sus dudas sobre la celebración de la verbena que tienen prevista en la semana cultural, 'para evitar que vengan coches de la zona'. Mora criticó la falta de información oficial.

La Unió de Llauradors recordó que el problema de la peste porcina es de tiempo. 'Cuanto antes se ataje, mejor', dijo su secretario general, Joan Brusca. Para Brusca, sería importante reforzar el número de veterinarios y poder realizar 'lo antes posible' los análisis en Valencia.Por su parte, el secretario comarcal del PSPV de La Serranía, José María Ángel, exigió una 'ayuda extraordinaria para toda la comarca'.

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