El temor a un rebrote de la inflación eleva los tipos a largo plazo a un máximo anual del 5,7%

Los mercados financieros europeos dieron un nuevo paso atrás ante la presión vendedora de la Bolsa de Nueva York y las declaraciones de dos miembros del Banco Central Europeo (BCE), que afirmaron que existe riesgo de inflación en los países del euro. La rentabilidad de la deuda española a 10 años llegó al 5,70%, y el euro cayó ante el dólar y el yen, contra los que fijó un cambio de 1,0683 dólares y 112,37 yenes. La Bolsa de Madrid retrocedió 6,40 puntos, un 0,76%. El Banco Central Europeo (BCE) debe decidir si sube o no los tipos de interés el próximo día 4.

Aunque el BCE debe decidir ...

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Los mercados financieros europeos dieron un nuevo paso atrás ante la presión vendedora de la Bolsa de Nueva York y las declaraciones de dos miembros del Banco Central Europeo (BCE), que afirmaron que existe riesgo de inflación en los países del euro. La rentabilidad de la deuda española a 10 años llegó al 5,70%, y el euro cayó ante el dólar y el yen, contra los que fijó un cambio de 1,0683 dólares y 112,37 yenes. La Bolsa de Madrid retrocedió 6,40 puntos, un 0,76%. El Banco Central Europeo (BCE) debe decidir si sube o no los tipos de interés el próximo día 4.

Aunque el BCE debe decidir sobre los tipos en su próxima reunión, antes de esa fecha espera conocer la evolución de la liquidez de las familias y las empresas en septiembre para tomar una decisión. En prevención de una subida de tipos, la rentabilidad de la deuda pública volvió a aumentar hasta sus niveles máximos anuales. Si en España las obligaciones a 10 años llegaron al 5,70%, en Alemania y Estados Unidos la tendencia fue similar y la rentabilidad de los bonos llegó al 5,471% y 6,262%, respectivamente. En estos dos países, estos títulos también marcaron rentabilidades máximas anuales.Los tipos de interés a largo plazo empezaron a subir desde mediodía tras conocerse sendas declaraciones de los consejeros del BCE, Otmar Issing y Eugenio Domingo Solans, expresando el temor al repunte de la inflación. En una conferencia en Londres, Issing vino a dar la razón a los que apuestan por que el BCE subirá pronto su tipo básico del 2,5%, al afirmar que "los cambios en los tipos de interés a largo plazo reflejan la percepción de un riesgo de inflación". Y añadió: "Si el banco central es creíble, los tipos a largo plazo no se moverán muy lejos de los niveles actuales con el mantenimeinto de las perspectivas de estabilidad de precios".

Solans, por su parte, dijo en Madrid durante una reunión con empresarios: "Creemos que la inflación puede aumentar en los próximos meses, aunque en ningún caso corremos el riesgo de alcanzar el límite del 2% el próximo año".

Mañana está previsto que se dé a conocer la evolución de la liquidez de familias y empresas (M3) durante el pasado mes de septiembre. Este indicador -que suma la evolución de los depósitos a la vista y a plazo, más las participaciones en fondos de dinero- se considera básico para anticipar la marcha de la inflación. En agosto acumuló un crecimiento interanual del 5,7%, superior al objetivo del 4,5% marcado por el BCE.

Por otra parte, los bandazos de la Bolsa de Nueva York -que al cierre perdió 118,70 puntos, el 1,13%- provocaron un nuevo retroceso de los mercados financieros europeos. La Bolsa de Madrid sufrió una caída del 0,76%. París perdió el 0,18% y sigue siendo la Bolsa más estable, mientras que Fráncfort cedió el 0,70% y Londres, un 0,82%. La Bolsa de Nueva York, que perdía 139 puntos a media sesión, fue suavizando su caída y mitigó su caída a 93 puntos, por los beneficios de las petroleras Exxon, Mobil, y Texaco, y la bajada de ATT, menor a la esperada.

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