La reaparición de Ángel Corella entusiasma al público neoyorquino

El bailarín destaca en la temporada del American Ballet

Ángel Corella, bailarín principal del American Ballet Theatre (ABT), no tuvo que esperar el final de su actuación del miércoles para escuchar los aplausos del público. Nada más pisar el escenario del City Center de Nueva York, los espectadores rompieron en gritos y palmas. Corella ya no se acordaba de la rotura de ligamentos que sufrió en junio, la primera lesión grave de su carrera, pero su público sí lo tenía presente. "La reacción de la gente ha sido maravillosa", comentó radiante el bailarín madrileño, una de las estrellas de la nueva temporada del ABT.

El American Ballet Theatre, u...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Ángel Corella, bailarín principal del American Ballet Theatre (ABT), no tuvo que esperar el final de su actuación del miércoles para escuchar los aplausos del público. Nada más pisar el escenario del City Center de Nueva York, los espectadores rompieron en gritos y palmas. Corella ya no se acordaba de la rotura de ligamentos que sufrió en junio, la primera lesión grave de su carrera, pero su público sí lo tenía presente. "La reacción de la gente ha sido maravillosa", comentó radiante el bailarín madrileño, una de las estrellas de la nueva temporada del ABT.

El American Ballet Theatre, una de las formaciones de danza clásica más prestigiosas del mundo, quiso celebrar su 60º aniversario con una obra de la vanguardista Martha Graham. Cuando el ABT (entre cuyos primeros bailarines también están el argentino Julio Bocca, el cubano José Manuel Carreño y la argentina Paloma Herrera) se puso en contacto con la compañía de la coreógrafa, en ésta no salían de su asombro: el ABT pretendía abrir la temporada de otoño en Nueva York con seis obras y ninguna de ellas es clásica."El ABT suele hacer en otoño piezas más contemporáneas, porque el escenario en el que bailamos es más pequeño", explicaba anteayer un cansado Corella tras dos días de actuaciones. "Lo clásico se suele dejar para la temporada de primavera, en el Metropolitan. Aunque es verdad que este año se ha ido a algo mucho más moderno", reconoce.

Para un bailarín clásico, lo moderno puede convertirse en algo doloroso. Carmen Corella, hermana de Ángel, que desde hace dos años forma parte del cuerpo de baile del ABT, es una de las que han sufrido en propia carne el "tremendo choque" que significa adaptarse a una coreografía contemporánea como la de Graham. "Cambian los movimientos, cambia la posición de los dedos, cambia el vestuario y hay que acostumbrarse a bailar, por ejemplo, con una falda larga. Pero el cambio más importante es bailar descalzos. Nos hemos hecho heridas al tener que apoyar las plantas de los pies y dar giros sobre un tapiz que sólo está preparado para bailar de puntas", explica.

La temporada de otoño del ABT incluye, además de Diversión de ángeles, creada por Graham en 1948, tres estrenos mundiales (de Lar Lubovitch, John Neumeier y Robert Hill). Los coreógrafos de las tres obras han elegido a Corella como bailarín principal. "Me gusta todo lo que bailo, disfruto con todo, pero también me encuentro muy a gusto con Billy el Niño , porque me permite actuar".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En