Dos pacientes han fallecido en el hospital de Mataró por un supuesto fallo en el sistema de gases

Dos pacientes han fallecido en el nuevo hospital de Mataró por un supuesto fallo en el sistema de suministro de gases. Los pacientes podrían haber recibido un gas anestésico en lugar del oxígeno que se pretendía administrarles. Así lo indican las primeras investigaciones iniciadas la semana pasada al comprobarse, cuando se iba a practicar una tomografía axial computerizada (TAC) a una niña de tres años, que por el tubo del oxígeno salía protóxido de nitrógeno, un producto anestesiante que inhalado de forma incontrolada puede causar graves daños. Al ser advertida a tiempo la anomalía por el per...

Dos pacientes han fallecido en el nuevo hospital de Mataró por un supuesto fallo en el sistema de suministro de gases. Los pacientes podrían haber recibido un gas anestésico en lugar del oxígeno que se pretendía administrarles. Así lo indican las primeras investigaciones iniciadas la semana pasada al comprobarse, cuando se iba a practicar una tomografía axial computerizada (TAC) a una niña de tres años, que por el tubo del oxígeno salía protóxido de nitrógeno, un producto anestesiante que inhalado de forma incontrolada puede causar graves daños. Al ser advertida a tiempo la anomalía por el personal sanitario, la niña no sufrió ningún problema, pero el Servicio Catalán de la Salud ordenó el precintado inmediato de los conductos y puso los hechos en conocimiento del juzgado de guardia.La investigación retrospectiva ha puesto de manifiesto que en fechas anteriores habían fallecido, por causas que entonces se consideraron naturales, dos pacientes ingresados en el servicio de Cuidados Intensivos, poco después de haber sido sometidos a un TAC para realizarles una prueba cerebral. Los pacientes se encontraban en estado grave y el fallo en el conducto de gases pudo precipitar su muerte, según las investigaciones efectuadas por los servicios médicos del propio hospital.

Cuando se produjo el incidente de la niña, el Departamento de Sanidad se apresuró a comunicar la avería al juez de guardia y abrió una investigación interna. Ya entonces se tenía la sospecha de que un anómalo funcionamiento del servicio de conducción de gases podría haber causado daños a otros pacientes. Josep Lafarga, responsable jurídico del Servicio Catalán de la Salud, indicó ayer que la investigación se ha encomendado a los servicios de inspección interna y que, hasta que no concluya, no se podrá afirmar que el fallo en la conducción de gases ha causado víctimas. El instructor de la investigación ha ordenado la revisión de todas las historias clínicas en las que se haya incluido una prueba de TAC que requiriera el uso de gases, que es un porcentaje muy pequeño sobre el total de este tipo de prueba.

El hospital de Mataró es un centro de nueva construcción que comenzó a funcionar en abril pasado.