ENDOCRINOLOGÍA

La combinación de un fármaco con insulina rebaja el azúcar en diabéticos de difícil control

Un equipo de Sevilla logra reducir con metformina los índices de glucosa en sangre

Un nuevo tratamiento, basado en la combinación de metformina e insulina, está demostrando un excelente resultado en pacientes diabéticos de alto riesgo, porque es muy difícil controlar sus niveles de azúcar en sangre. Con este tratamiento, los pacientes pierden peso, reducen su nivel de colesterol y, lo que es más importante, en algunos casos, el índice de glucosa en sangre baja hasta los niveles de una persona sana.El resultado de este tratamiento ha sido publicado en la revista británica especializada Diabetic Medicine del pasado diciembre. Su autor, el endocrino Federico Relimpio Ast...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Un nuevo tratamiento, basado en la combinación de metformina e insulina, está demostrando un excelente resultado en pacientes diabéticos de alto riesgo, porque es muy difícil controlar sus niveles de azúcar en sangre. Con este tratamiento, los pacientes pierden peso, reducen su nivel de colesterol y, lo que es más importante, en algunos casos, el índice de glucosa en sangre baja hasta los niveles de una persona sana.El resultado de este tratamiento ha sido publicado en la revista británica especializada Diabetic Medicine del pasado diciembre. Su autor, el endocrino Federico Relimpio Astolfi, que durante dos años ha estudiado a 47 de estos enfermos, asegura que el tratamiento, "descubierto por casualidad", viene a ser una medida terapéutica muy válida para este tipo de pacientes, "a los que hasta ahora no se sabía cómo tratar". "Sólo falta", continúa, "que otros equipos médicos comprueben y acrediten lo que nosotros ya hemos demostrado".

En España hay 2,4 millones de diabéticos diagnosticados y se estima que el 15% de ellos está en situación de riesgo por la dificultad de reducir sus niveles de azúcar en sangre. El estudio ha sido realizado en el Centro de Especialidades Periféricas Virgen de los Reyes de Sevilla, y en él han participado pacientes de tres consultorios distintos de endocrinología.

Un fármaco antiguo

La metformina pertenece al grupo de las biguanidas, que se prescriben para bajar los niveles de azúcar en la sangre. Su forma de actuar sobre los músculos hace que éstos, más sensibles, capten mejor la insulina que el cuerpo necesita para metabolizar el azúcar. Por eso, estos fármacos se recetan normalmente a los diabéticos del tipo 2, que son los que adquieren la enfermedad cuando ya son mayores y que normalmente no necesitan inyectarse insulina, al menos durante un largo periodo de tiempo.

El efecto más común de este medicamento es que reduce, "moderadamente", dice Relimpio, el apetito. También ayuda a bajar los niveles de colesterol y los triglicéridos. La única contraindicación es que no debe administrarse a personas con insuficiencia renal. La metformina no es un fármaco de reciente aparición, pero ha estado en desuso durante más de veinte años, "o su utilización ha sido intermitente", matiza Relimpio, debido a ciertos experimentos contradictorios sobre la fenformina, otro fármaco del grupo de las biguanidas. Algunos resultados indicaban que la fenformina provocaba en algunos pacientes acidosis láctica (acumulación de ácido láctico en la sangre).

En España, la metformina nunca dejó de utilizarse. Los especialistas siguieron prescribiéndola en la primera fase de la diabetes. Ahora, Relimpio Astolfi ha encontrado una nueva indicación. El experimento consistió en dividir, al azar, en dos grupos a diabéticos mal controlados con porcentajes de hemoglobina glicosilada (parámetro que se utiliza para el control de la diabetes) superiores a 9,5 unidades. En una persona sana, este porcentaje es de 5,5 unidades, y en un diabético, lo normal es que no sobrepase las 7,5.

Al primer grupo se le aplicó el habitual tratamiento de insulina. Y al segundo, además de la insulina, se le administró una pastilla de metformina tres veces al día. Mientras que en el primer grupo se vio que los pacientes no mejoraban, incluso algunos tuvieron que aumentar su dosis de insulina, en el segundo los porcentajes de insulina glicosilada se redujeron del 9,6 de media al 7,7.

Tratamiento barato

Relimpio Astolfi califica a la metformina como "fenómeno estrella de los años noventa", y aclara que no es la panacea, pero sí supone un alivio para estos pacientes, "con los que ya había muy poco que hacer". Ahora viven más y en mejores condiciones, y además pierden peso, que es uno de los problemas más graves para estos pacientes. El medicamento es barato (una caja de 50 grageas cuesta 468 pesetas). Por eso, para Relimpio, el valor de su descubrimiento radica en que es "una herramienta barata y eficaz, asequible para todo el mundo".

Archivado En