Los críticos del cristianismo, a favor del divorcio y el sexo sin procreación

Los principales campos en los que se ponen de manifiesto las críticas de los pensadores cristianos progresistas, además del aborto, son el divorcio, las relaciones sexuales, la planificación familiar y la marginación de la mujer. Los teólogos reivindican que la Iglesia revise su doctrina sobre estas cuestiones y que se abra al diálogo con la sociedad. Éstas son, en síntesis, sus posiciones sobre los problemas más candentes.Aborto. La defensa de la vida es algo que se debe conciliar con el respeto a las opiniones de los demás, dicen estos teólogos. Se debe incitar a los demás a la reflex...

Los principales campos en los que se ponen de manifiesto las críticas de los pensadores cristianos progresistas, además del aborto, son el divorcio, las relaciones sexuales, la planificación familiar y la marginación de la mujer. Los teólogos reivindican que la Iglesia revise su doctrina sobre estas cuestiones y que se abra al diálogo con la sociedad. Éstas son, en síntesis, sus posiciones sobre los problemas más candentes.Aborto. La defensa de la vida es algo que se debe conciliar con el respeto a las opiniones de los demás, dicen estos teólogos. Se debe incitar a los demás a la reflexión sobre la conveniencia o no de ampliar la ley del aborto en España, pero el mejor camino para exponer las propias ideas, o incluso para convencer a los demás de que se tiene razón, no es nunca la prohibición y el recurso a métodos autoritarios, como atribuyen a la Conferencia Episcopal.

Sexualidad. Los teólogos progresistas creen que la orientación actual de la Iglesia es represiva y una de sus principales asignaturas pendientes. El problema radica, según estos pensadores, en que la jerarquía concede poca importancia al cuerpo y valora en exceso la parte espiritual. Sin embargo, estos teólogos consideran que la sexualidad es uno de los cauces de expresión de los seres humanos y como tal debe apreciarse.

Divorcio. El argumento del cristianismo para estar en contra del divorcio, señalan los pensadores progresistas, es que el matrimonio cristiano es el sacramento del amor. "No hay que olvidar que el amor puede morir y, cuando eso ocurre, desaparece con él el sentido de ese matrimonio", afirman los críticos.

Marginación de la mujer. La Iglesia sigue pensando que el referente del cristianismo es el varón y no valora la exposición que hacen las mujeres sobre él y cómo ven ellas la relación entre religiosidad y fecundidad. La Iglesia considera que la espiritualidad viene marcada por los varones y se niega a ordenar a mujeres porque Jesucristo sólo ordenó a varones.

Las principales tendencias del cristianismo progresista en estos días son: la teología de la liberación, la teología política, la teología desde la marginación y la teología feminista. Algunos organismos que representan las ideas de estos pensadores son:

-Instituto Superior de Pastoral. Depende de la Universidad Pontificia de Salamanca, aunque tiene su sede en Madrid. Imparte una licenciatura en Teología.

-Instituto Fe y Secularidad. Adscrito a la Universidad Pontificia de Comillas y dirigido por jesuitas. Es de los más abiertos dentro del panorama teológico español. Se fundó hace 30 años, justo después del Concilio Vaticano II. La característica principal de este centro es la interdisciplinaridad. Además de cursos sobre teología, organiza seminarios monográficos sobre temas como budismo y cristianismo, teología feminista, ética, medios de comunicación o la inmigración.

-Escuela Bíblica. Centrada en el estudio de las Sagradas Escrituras con una perspectiva histórico-crítica, alejada del fundamentalismo. Se analiza la Biblia desde el punto de vista literario y de las ciencias sociales.

-Escuelas de teología. Están repartidas por una docena de ciudades españolas. Algunas dependen de parroquias progresistas, y su característica principal es que dan formación a los cristianos para que fundamenten sus creencias y no sean meros repetidores de doctrinas aprendidas.