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España es el único país de la Unión Europea donde aumentó, aunque ligeramente, la mano de obra agrícola en 1997, frente a la tendencia general a la baja, según publicó ayer la Oficina de Estadística de la UE, Eurostat. En 1997, el volumen total de la mano de obra agrícola descendió un 1,8% en la Unión. En España, por el contrario, aumentó en un 0, 2% debido a que la reducción de un 4,1% de la mano de obra familiar se vio compensada por un aumento del 9,8% de la mano de obra no familiar.

Eurostat atribuye el aumento al gran número de temporeros contratados para las abundantes cosechas d...

España es el único país de la Unión Europea donde aumentó, aunque ligeramente, la mano de obra agrícola en 1997, frente a la tendencia general a la baja, según publicó ayer la Oficina de Estadística de la UE, Eurostat. En 1997, el volumen total de la mano de obra agrícola descendió un 1,8% en la Unión. En España, por el contrario, aumentó en un 0, 2% debido a que la reducción de un 4,1% de la mano de obra familiar se vio compensada por un aumento del 9,8% de la mano de obra no familiar.

Eurostat atribuye el aumento al gran número de temporeros contratados para las abundantes cosechas de frutas y aceitunas. En el resto de los Quince, se produjeron reducciones de la mano de obra agrícola, desde el 4, 4% de Luxemburgo al 3,4% de Alemania.