Liturgias del extrarradio
Condenada al extrarradio, la grey roquera continúa celebrando sus ritos a la manera de la liturgia clásica. En el barrio de San Blas se dieron cita para festejar la buena estrella de los bilbaínos Platero y Tú, cuarteto que ya ha llegado a su séptimo elepé -el último se llama precisamente así: Siete- Su aparición escénica fue precedida por dos grupos de similares características: De Pasada y Flying Rebollos.Los primeros salían tan temprano que muy pocos pudieron asistir a su vibrante repertorio. En cuanto a los segundos, con ellos toca algún reconocido músico de los santanderinos Del To...
Condenada al extrarradio, la grey roquera continúa celebrando sus ritos a la manera de la liturgia clásica. En el barrio de San Blas se dieron cita para festejar la buena estrella de los bilbaínos Platero y Tú, cuarteto que ya ha llegado a su séptimo elepé -el último se llama precisamente así: Siete- Su aparición escénica fue precedida por dos grupos de similares características: De Pasada y Flying Rebollos.Los primeros salían tan temprano que muy pocos pudieron asistir a su vibrante repertorio. En cuanto a los segundos, con ellos toca algún reconocido músico de los santanderinos Del Tonos y su estilo se decanta por el rock'n'roll americano de finales de los sesenta, con olor a gasolinera y melenas al viento. Suenan bien y están a punto de poner un disco en circulación. A pesar de su asesor de imagen, merece la pena no perderles de vista.
Platero y Tú, Flying Rebollos y De Pasada
Sala Canciller. Madrid, 13 de diciembre.
Con la pista atestada de jóvenes que tarareaban absolutamente todo lo que salía por los altavoces de la sala -Ska-P fundamentalmente-, aparecieron Platero y Tú y estalló la juerga. Sin tener un sonido especialmente bueno, el grupo se metió en el bolsillo al respetable desde el primer acorde y comenzaron los botes y los cánticos.
La guitarra de Iñaki, la personalidad vocal de Fito y una sección rítmica consistente forman un paquete sumamente atractivo, en el que el rock suena mucho más melódico de lo que podría esperarse en un principio a juzgar por la actitud radical del grupo. En cuanto a los temas, en directo se hacen fácilmente digeribles y uno puede encontrarse enganchado al segundo estribillo sin darse cuenta.
Por resaltar algún título, Mary Madalena resume perfectamente el modo de hacer de una banda llamada a formar en la primera fila de la última generación del rock español en castellano.