No nos rendimos

Somos tres estudiantes y pertenecemos a un pueblo llamado Fabero del Bierzo. Nos dirigimos a este periódico para expresar nuestra indignación, ya que día a día presenciamos un grave problema medioambiental que estamos seguros se podría evitar. Nos referimos a las explotaciones a cielo abierto, las cuales, entre otras cosas, están destruyendo el paisaje y contaminando la atmósfera.Al principio de estar sucediendo esto, la gente estaba -y por qué no hablar del presente-, está contenta con lo que está sucediendo, porque sólo mira que da puestos de trabajo y todavía no se conciencia con la realid...

Somos tres estudiantes y pertenecemos a un pueblo llamado Fabero del Bierzo. Nos dirigimos a este periódico para expresar nuestra indignación, ya que día a día presenciamos un grave problema medioambiental que estamos seguros se podría evitar. Nos referimos a las explotaciones a cielo abierto, las cuales, entre otras cosas, están destruyendo el paisaje y contaminando la atmósfera.Al principio de estar sucediendo esto, la gente estaba -y por qué no hablar del presente-, está contenta con lo que está sucediendo, porque sólo mira que da puestos de trabajo y todavía no se conciencia con la realidad que pasa ante sus ojos. Pero aún quedan personas que creen en sus derechos y en luchar por lo que quieren. Por eso nosotros no nos rendimos, porque sabemos que tarde o temprano alguien nos tiene que escuchar, apoyar y ayudar.

Sabemos muy bien que esta zona es minera, y como tantas otras sufre sus consecuencias, pero cuando había minas subterráneas, la contaminación no era tan gran de como hoy en día. Desde que el Ayuntamiento del pueblo citado dio el permiso de explotar a cielo abierto, esto se está convirtiendo en una zona cubierta de una nube grande oscura, rellena de polvo y contaminación, que no deja paso a un oxígeno puro y limpio como el que había antes de que empezara todo esto.

Nosotros queremos una solución a este problema, que cada día que pasa se va haciendo más grande, y creemos que una de las soluciones podría ser crear más puestos de trabajo con industrias, canteras...

Sólo pretendemos con esta carta que alguien atienda nuestro tan desesperado llamamiento y que la gente se conciencie de que, como esto siga así, dentro de poco nos v 1 amos a quedar sin minería, sin trabajo y, lo que es peor, sin una zona que es preciosa y que, se podría utilizar para cosas mucho más útiles que destruirla.-