Los trabajadores de Manila siguen encerrados en la cafetería

Una decena de trabajadores de la cafetería Manila continuaban ayer por la tarde encerrados en el local de la plaza de Callao para protestar por la clausura del establecimiento, decidida por los herederos tras la muerte del fundador, Luis Zamorano Fraile.Cuatro vigilantes acompañaban a los empleados, que carecen de luz y agua. Pese a las incomodidades, piensan mantener su actitud. "Luchamos contra la injusticia de este cierre. El establecimiento es rentable. La deuda se debe a la mala gestión", afirmaba uno de los encerrados, Francisco de la Rosa, ex encargado de la céntrica cafetería de...

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Una decena de trabajadores de la cafetería Manila continuaban ayer por la tarde encerrados en el local de la plaza de Callao para protestar por la clausura del establecimiento, decidida por los herederos tras la muerte del fundador, Luis Zamorano Fraile.Cuatro vigilantes acompañaban a los empleados, que carecen de luz y agua. Pese a las incomodidades, piensan mantener su actitud. "Luchamos contra la injusticia de este cierre. El establecimiento es rentable. La deuda se debe a la mala gestión", afirmaba uno de los encerrados, Francisco de la Rosa, ex encargado de la céntrica cafetería de Gran Vía, 41.

La clausura de Manila se llevó a cabo este jueves, después de casi medio siglo de actividad. Los herederos del fundador han decidido renunciar incondicionalmente a la herencia y no continuar con el negocio. Una cuarentena de empleados pierde su trabajo.

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