FERIA DE SAN ISIDRO

Los toros de Ibán que están en la Venta no pasan de discretos

Ya están en la Venta del Batán los toros para dos de las próximas corridas de la feria. Pueden verse los de Baltasar Ibán, destinados el día 19 para los matadores Luis Francisco Esplá, Pepín Liria y el sustituto de Javier Vázquez y los de Victoriano del Rio, que matarán el día 20 Joselito, El Tato y Luis Miguel Encabo, que tomará la alternativa.El encierro de Balatasar Ibán se presenta muy parejo en carnes y encornadura. Se trata de una corrida que impone menos respeto que en anteriores ocasiones. No viene con la gordura con la que otras divisas se presentan en Madrid, en intento de aparentar ...

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Ya están en la Venta del Batán los toros para dos de las próximas corridas de la feria. Pueden verse los de Baltasar Ibán, destinados el día 19 para los matadores Luis Francisco Esplá, Pepín Liria y el sustituto de Javier Vázquez y los de Victoriano del Rio, que matarán el día 20 Joselito, El Tato y Luis Miguel Encabo, que tomará la alternativa.El encierro de Balatasar Ibán se presenta muy parejo en carnes y encornadura. Se trata de una corrida que impone menos respeto que en anteriores ocasiones. No viene con la gordura con la que otras divisas se presentan en Madrid, en intento de aparentar el trapío que se exige en Las Ventas, pero algunos toros vienen muy descolgados de carnes. El toro más largo es el número 73. Tienen hechuras de novillo el 38 y el 46. Hay un 37 que da la impresión de estar cojo. Un toro castaño, marcado con el número 75, presenta dos varetazos en los ijares, como consecuencia de los hachazos que le ha propinado el número 37. Y hay un ejemplar de cierta guapeza: el número 55.

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Los toros de Baltasar Iban, sin que pueda decirse que carecen del aire de los Contreras, parecen mas bien, un encierro de Carlos Núñez. Sobre todo, el número 37.

La corrida de Victoriano del Rio está también muy igualada. Son reses cortas y enmorrilladas. Tampoco está gorda.

El ejemplar marcado con el número 20 se ha astillado un pitón.

Destaca la altura de agujas del número 43, un toro con alzada, que se encaraba con los visitantes que, imprudentemente, le llamaban la atención desde el borde de las corraletas. El toro más chico es el 36.

Hay un toro negro bragado, señalado con el número 43, que es, entre todos, el de presencia más aceptable.

Puede decirse que ambas corridas están discretamente presentadas, sin exageraciones. Tanto uno como otro ganadero, han procurado escoger encierros igualados, tratando de que no destaque un ejemplar más que otro.

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