Descubierta una supuesta estafa de 800 millones en una empresa que vendía gasóleo en todo el Estado

Cinco personas relacionadas con una empresa de hidrocarburos situada en un polígono industrial de Granada se encuentran en prisión provisional sin fianza desde hace una semana acusados de participar en una estafa de 800 millones de pesetas. El cerebro de la operación, sin embargo, no ha sido localizado. La empresa vendía a toda España desde primeros de año gasóleo muy barato ya que tenía intención de no pagar a Hacienda los impuestos que gravan la venta de carburantes ni el IVA. En pocos meses Hidrocarburos Andaluces -que estaba representada por un "hombre de paja"- se había echo con un...

Cinco personas relacionadas con una empresa de hidrocarburos situada en un polígono industrial de Granada se encuentran en prisión provisional sin fianza desde hace una semana acusados de participar en una estafa de 800 millones de pesetas. El cerebro de la operación, sin embargo, no ha sido localizado. La empresa vendía a toda España desde primeros de año gasóleo muy barato ya que tenía intención de no pagar a Hacienda los impuestos que gravan la venta de carburantes ni el IVA. En pocos meses Hidrocarburos Andaluces -que estaba representada por un "hombre de paja"- se había echo con una enorme cartera e clientes que pagaban el litro e gasóleo 22 pesetas por debajo del precio habitual.La investigación, que se encuentra amparada por el secreto sumarial, aún está en marcha y además de las personas encarceladas han sido detenidos dos individuos más, que se encuentran en libertad. Asimismo se efectúan pesquisas para conocer el grado de relación que tenían con los detenidos varias grandes suministradoras de carburantes.

Hidrocarburos Andaluces, situada en un hangar del polígono Juncaril, en el término de Albolote, fue recomprada a finales de 1995 por los presuntos cabecillas de la operación, todos ellos muy vinculados al negocio de los carburantes. Su objetivo era vender desde allí gasóleo muy barato ya que no tenían intención de abonar el impuesto especial de carburantes ni el IVA. Cuando la delegación de Tributos descubriera el engaño la empresa habría desaparecido. Para ello, los supuestos impulsores de la estafa -personas muy vinculadas con la compraventa de carburantes- tomaron la cautela de no dejar constancia de su identidad en la operación de compra de Hidrocarburos Andaluces, al frente de la cual pusieron a un individuo ajeno a los pormenores de la estafa, que cobraba el paro aunque era propietario de un mercedes.

La venta de gasóleo a un precio muy por debajo del normal comenzó a primeros de año. La sospecha que indujo al Servicio de Vigilancia Aduanera a iniciar la investigación fue que Hidrocarburos Andaluces refinaba ilegalmente combustible y que era capaz por ejemplo, mediante la manipulación, de duplicar una cuba de gasoil. En efecto, uno de los individuos detenidos era el encargado de dirigir el refinamiento del carburante.