Salvar balseros y 'bombardear' la isla con panfletos

La organización Hermanos al Rescate, de la que forman parte varias decenas de pilotos voluntarios, se formó en 1991 con el objetivo de patrullar el espacio aéreo sobre el estrecho de Florida y ayudar a los balseros que abandonaban la isla. Hermanos al Rescate reunió entonces una flotilla de cinco avionetas y estableció su cuartel general en el aeropuerto de Opa-Locka, cerca de Miami. Con el piloto José Basulto al frente, los hermanos tuvieron su momento de mayor popularidad en la crisis de 1994, cuando unos 30.000 cubanos se echaron al agua ante la pasividad de las autoridades de La...

La organización Hermanos al Rescate, de la que forman parte varias decenas de pilotos voluntarios, se formó en 1991 con el objetivo de patrullar el espacio aéreo sobre el estrecho de Florida y ayudar a los balseros que abandonaban la isla. Hermanos al Rescate reunió entonces una flotilla de cinco avionetas y estableció su cuartel general en el aeropuerto de Opa-Locka, cerca de Miami. Con el piloto José Basulto al frente, los hermanos tuvieron su momento de mayor popularidad en la crisis de 1994, cuando unos 30.000 cubanos se echaron al agua ante la pasividad de las autoridades de La Habana. El grupo asegura que entre su labor y los avisos al Servicio de Guardacostas de Estados Unidos ha ayudado a salarse a más de 6.000 balseros.

Gracias a estas misiones de salvamento y a la carga romántica de su tarea, Hermanos al Rescate se forjó un gran prestigio entre el exilio, que contribuyó a reforzar financieramente la organización. Con medios a su alcance, pero casi sin balseros a los que ayudar debido a los acuerdos de inmigración entre Washington y La Habana, su punto de mira se trasladó a acciones más espectaculares, como el bombardeo con panfletos sobre La Habana y dejando caer ramos de flores sobre guardacostas cubanos.

Cuba se quejó, y advirtió sobre los riesgos de la violación del espacio aéreo. Al menos en dos ocasiones, el Gobierno norteamericano trasladó estas advertencias al grupo, y las autoridades de aviación civil abrieron una investigación, amenazando a Basulto y a sus hombres con la retirada de las licencias de piloto. El mes pasado, después de otras dos misiones sobre La Habana, hubo una nueva protesta ante el Departamento de Estado. Mike McCurry, portavoz de la Casa Blanca, dijo el sábado por la noche que el destino consignado en el plan de vuelo de las avionetas abatidas era Bahamas. "Nunca aceptaríamos planes de vuelo con Cuba como destino", aseguró McCurry.