CONFERENCIA SOCIALISTA

El PSOE nunca asumirá responsabilidad por el 'caso GAL' al sentirse ajeno a esos asesinatos

Por primera vez, dirigentes socialistas sentaron doctrina sobre la posible responsabilidad política del PSOE en la creación y actuación de los GAL. Nunca el PSOE asumirá la responsabilidad política por el caso GAL al sentirse "completamente ajeno" a la actuación de unos criminales. Así lo manifestaron ayer el ex presidente de la comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, y el secretario general de los socialistas vizcaínos, Nicolás Redondo Terreros. Así, no prosperó la enmienda que el alavés Fernado Buesa presentó en la conferencia política y según la cual la creación de los GAL, por parte de quien...

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Por primera vez, dirigentes socialistas sentaron doctrina sobre la posible responsabilidad política del PSOE en la creación y actuación de los GAL. Nunca el PSOE asumirá la responsabilidad política por el caso GAL al sentirse "completamente ajeno" a la actuación de unos criminales. Así lo manifestaron ayer el ex presidente de la comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, y el secretario general de los socialistas vizcaínos, Nicolás Redondo Terreros. Así, no prosperó la enmienda que el alavés Fernado Buesa presentó en la conferencia política y según la cual la creación de los GAL, por parte de quien fuera, fue un error político, además de afirmarse que los organizadores "actuaban dentro de las estructuras del. Ministerio del Interior".

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La conferencia política del PSOE transcurría con normalidad en tanto que los casi 500 asistentes trabajaban divididos en tres comisiones, reflexionando sobre el pasado, sus aciertos y sus errores, los retos del futuro y las reformas necesarias para este país en los próximos años.Joaquín Leguina, Nicolás Redondo Terreros y José Borrell, ministro de Obras Públicas y Transportes, interrumpieron los trabajos a primera hora de la noche para dar cuenta de por dónde iban las cosas en la conferencia, que hoy será clausurada por Felipe González.

Llamó la atención de los informadores que nada se dijera de los GAL y que incluso no tuviera visos de prosperar la enmienda presentada al manifiesto político, firmada por Fernando Buesa, en la que se extendía sobre las actividades ¡legales de ese grupo.

Entonces, por primera vez, se escuchó en las filas del PSOE afirmar que nadie espere la asunción de responsabilidades por parte de los socialistas en un asunto como el de los GAL, del que abominan y al que se sienten ajenos porque nunca han estado involucrados en él.

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El ex presidente madrileño, Joaquín Leguina, lo dejó claro. Una cosa son los casos de corrupción, en los que los socialistas asumen la responsabilidad por las personas involucradas en asuntos económicos, y otra diferente son los asesinatos. "El partido nunca ha asumido nada que tenga que ver con actividades violentas, con asesinatos, y creemos que nunca lo va a tener que asumir", manifestó.Le acompañó en sus apreciaciones contundentes el dirigente vizcaíno Nicolás Redondo Terreros. Con cierta emoción, este político vasco rememoró los tiempos en los que su partido, "en solitario", se oponía a los violentos e incluso cuando recibía ataques "con muertos y heridos" de militantes socialistas.

"Nunca nadie de mi partido ha defendido la idea de combatir esos actos violentos por métodos ilegales, nunca", recalcó Redondo Terreros. Desde esa perspectiva, dejó claro, al igual que lo hizo Leguina, que el PSOE no se ve impelido y concernido a. asumir responsabilidades por un asunto criminal que le es del todo ajeno.

Ciertamente, en las respectivas comisiones no se hablaba de estas cosas, aunque sí de los fallos. No obstante, Joaquín Leguina dio por sentado que en los 13 años de Gobierno socialista "ha habido muchos más aciertos que errores. Quien se acerque a las urnas con ojos limpios reconocerá que el PSOE tiene un aval para pedir de nuevo el voto".

José Borrell aseguró que su partido tiene soluciones diferentes a las que pueda presentar el PP para cada problema. "Para la derecha, todo son mercancías. Para la izquierda, hay mercancías y derechos".

Nicolás Redondo, ponente de la comisión que hablaba de los retos del futuro, informó del interés de los intervinientes, y así quedará reflejado en el texto final, de que "el PSOE se reencuentre con los sindicatos de clase Comisiones Obreras y Unión General de Trabajadores".

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