Canadá permite cazar más focas en 1996

El ministro de Pesca y Océanos de Canadá, Brian Tobin -famoso por su postura intransigente en la guerra del fletán con España y la UE a comienzos de este año- ha dado vía libre para cazar un 30% más de focas en 1996: es decir, de los 186.000 ejemplares permitidos de focas de Groenlandia -la variedad más abundante- ahora podrá subirse al cuarto de millón.Las organizaciones ecologistas se han opuesto inmediatamente a la medida. El Fondo Internacional para el Bienestar de los Animales (IFAW), con sede en Londres, anunció como réplica el boicoteo a las importaciones de salmón canadiense y c...

El ministro de Pesca y Océanos de Canadá, Brian Tobin -famoso por su postura intransigente en la guerra del fletán con España y la UE a comienzos de este año- ha dado vía libre para cazar un 30% más de focas en 1996: es decir, de los 186.000 ejemplares permitidos de focas de Groenlandia -la variedad más abundante- ahora podrá subirse al cuarto de millón.Las organizaciones ecologistas se han opuesto inmediatamente a la medida. El Fondo Internacional para el Bienestar de los Animales (IFAW), con sede en Londres, anunció como réplica el boicoteo a las importaciones de salmón canadiense y calificó a Tobin como "el mayor asesino mundial de la fauna". Campañas similares europeas en los años 70 causaron la casi total desaparición del mercado para los cazadores canadienses de focas. De hecho, en los últimos años no se han superado las 60.000 capturas, dada la carencia de mercado para la carne y piel de esos animales. Canadá mantendrá en 1996 la subvención para esos cazadores.

Tobin culpa a las focas del deterioro de las reservas de bacalao. "Sólo hay un gran pescador de bacalao", dice, "y son las focas". Según sus datos, las focas devoraron en 1994 unos siete millones de toneladas de bacalao. La Organización Pesquera del Atlántico Noroeste (NAFO) sólo autoriza 11.000 toneladas, para permitir la recuperación de la especie.