Crítica:ALERTA MÁXIMA 2

Los peligros de viajar en tren

En Alerta máxima 2, Steven Seagal vuelve a encarnar a Casey Ryback, el ex marine y cocinero que siempre se encuentra casualmente en los lugares de mayor peligro y gracias a su habilidad con las artes marciales, su frialdad y buena suerte logra vencer a los más sofisticados malvados.Si en la primera entrega se en frenta en un transatlántico de la Armada con unos malvados que quieren apoderarse de las armas nucleares que transporta para dominar el mundo, en esta segunda son otros in uy similares que desde un tren de lujo de pasajeros que se desliza entre las Montañas Rocosas contro...

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En Alerta máxima 2, Steven Seagal vuelve a encarnar a Casey Ryback, el ex marine y cocinero que siempre se encuentra casualmente en los lugares de mayor peligro y gracias a su habilidad con las artes marciales, su frialdad y buena suerte logra vencer a los más sofisticados malvados.Si en la primera entrega se en frenta en un transatlántico de la Armada con unos malvados que quieren apoderarse de las armas nucleares que transporta para dominar el mundo, en esta segunda son otros in uy similares que desde un tren de lujo de pasajeros que se desliza entre las Montañas Rocosas controlan un sofisticado satélite militar de ataque con el que quieren destruir el Pentágon o su supuesto subterráneo reactor nuclear.

Under siege 2

Director: Geoff Murphy. Guionistas: Richard Hatem, Matt Reeves.Fotografía: Robbie Greenberg. Música: Basil Poledouris. Estados Unidos, 1995. Intérpretes: Steven Seagal, Eric Bogosian, Everett MeGill, Catherine Heigl. Estreno en Madrid: Palacio de la Prensa, Roxy B, Velázquez, Ciudad Lineal, Cristal, La Vaguada, Canciller, Albufera, Plaza Aluche, Colombia.

La ventaja de esta segunda entrega frente a la primera es que se desarrolla casi íntegramente en un tren en marcha, lo que da al conjunto una especial movilidad y permite una amplia gama de juegos espectaculares. Todo ello dentro de una tradicional y convencional estructura, que el realizador neozelandés Geoff Murphy, instalado en la industria cinematográfica. norteamericana desde hace algunos anos, controla con mano de hierro para lograr el mejor de sus trabajos.

Frente a estas virtudes aparece un siempre demasiado frío e inexpresivo Steven Seagal. Así como el hecho de que no exista la menor intriga romántica.

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