Lindsay Kemp estrena en Madrid su ácida visión sobre Cenicienta

Nuria Moreno protagoniza el último espectáculo del director británico

La última transgresión de Lindsay Kemp, su ácida visión escénica del tradicional cuento de Cenicienta, convertido en una opereta gótica, llega a los escenarios madrileños, donde se estrena mañana en el teatro Nuevo Apolo. El director y actor británico pretende erizar al público con este espectáculo que ha realizado con Carlos Miranda. En el papel principal, una actriz española, Nuria Moreno, quien ha conseguido que, por primera vez, un profesional español esté nominado para el premio teatral británico Laurence Olivier 1995.

Cenicienta fue estrenada hace un año en Vitoria. Tras un...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La última transgresión de Lindsay Kemp, su ácida visión escénica del tradicional cuento de Cenicienta, convertido en una opereta gótica, llega a los escenarios madrileños, donde se estrena mañana en el teatro Nuevo Apolo. El director y actor británico pretende erizar al público con este espectáculo que ha realizado con Carlos Miranda. En el papel principal, una actriz española, Nuria Moreno, quien ha conseguido que, por primera vez, un profesional español esté nominado para el premio teatral británico Laurence Olivier 1995.

Cenicienta fue estrenada hace un año en Vitoria. Tras unas contadas representaciones en España ha recorrido con importante éxito países como Japón, Italia y Gran Bretaña. Por su papel protagonista en Cenicienta, Nuria Moreno es una de las tres candidatas, entre 450 actores, al premio Laurence Olivier, considerado uno de los galardones más importantes del mundo teatral. Kemp, normalmente atacado de los nervios en los días previos a un estreno en Madrid, ciudad que siempre visita con sus espectáculos desde el impacto que causó hace 20 años con Flowers, dice mostrarse muy tranquilo por primera vez en su vida: "Tengo una gran confianza en este montaje, se hizo para que fuera el mejor, al menos de mi producción, y tengo claro que se ha conseguido, otra cosa es que como actor, cuando el miércoles tenga que salir al escenario, me entren ganas de vomitar como es habitual", afirma.El príncipe, que interpreta el propio Lindsay Kemp, no es el joven apuesto y romántico que se enamora perdidamente de la dulce Cenicienta. Es un gobernante, un poco talludo, que vive de espaldas a su pueblo, con una inclinación claramente homosexual, al que lo único que le interesa de Cenicienta son esos maravillosos y cristalinos zapatos. Ella, por su parte, tampoco es un angelito, y muestra todas sus miserias y ambiciones. "Elegí Cenicienta", dice Kenip, "porque es una historia apasionante, la mostramos con un estilo que se encuadra dentro del teatro total, ese que no tiene escapatoria, que seduce, que ataca, que captura todos los sentidos".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En