Un pequeño gran presupuesto

La ministra de Sanidad y Consumo, María Angeles Amador, está dispuesta a reducir gastos y el decreto que ha puesto en marcha forma parte del plan. La primera y más importante medida tomada en julio de 1993 a este respecto fue el Decreto de Financiación Selectiva del Medicamento, que muchos bautizaron como el medicamentazo, ante las protestas de Amador, que reniega del apodo. Este decreto dejó fuera de la financiación pública un total de 740 medicamentos que tratan patologías menores.En septiembre llegó el acuerdo del ministerio con los laboratorios farmacéuticos -Farmaindustria-, que ac...

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La ministra de Sanidad y Consumo, María Angeles Amador, está dispuesta a reducir gastos y el decreto que ha puesto en marcha forma parte del plan. La primera y más importante medida tomada en julio de 1993 a este respecto fue el Decreto de Financiación Selectiva del Medicamento, que muchos bautizaron como el medicamentazo, ante las protestas de Amador, que reniega del apodo. Este decreto dejó fuera de la financiación pública un total de 740 medicamentos que tratan patologías menores.En septiembre llegó el acuerdo del ministerio con los laboratorios farmacéuticos -Farmaindustria-, que aceptaron una rebaja unilateral del 3% en sus productos. En enero de este año, el ministerio, gracias a otro decreto, rebanó los beneficios comerciales de las farmacias (el 30%), en dos puntos.

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Las tres medidas adoptadas hasta el momento van a suponer al Sistema Nacional de Salud un ahorro estimado en 75.000 millones de pesetas, es decir, más de un 10% del gasto total en medicamentos, que en 1993 fue de 675.225 millones de pesetas.

El gasto en los llamados efectos y accesorios es, por tanto, sólo un 1,48% del gasto total. Un porcentaje pequeño que, cuando se tratan cifras tan abultadas, se convierten en un gran desembolso de 10.000 millones.

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