Crítica:FLAMENCO

Buenas intenciones

Este grupo de cubanos combina hábilmente los sones de allá y los cantes de acá. No se trata de ningún tipo de fusión, sino de una alternancia de géneros, que se suceden a gran velocidad en las interpretaciones de este grupo y Luisa González, cantante y cantaora. Hacen mejor lo caribeño que es lo suyo y lo entienden dominan sin ningún esfuerzo. El flamenco es distinto, aunque es tratado con respeto y un notorio afán de fidelidad. La cantaora tiene buen eco en algunos tercios de los cantes, pero no puede redondear ninguno con solvencia. A veces mete el acelerador y uno se queda casi sin aliento ...

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Este grupo de cubanos combina hábilmente los sones de allá y los cantes de acá. No se trata de ningún tipo de fusión, sino de una alternancia de géneros, que se suceden a gran velocidad en las interpretaciones de este grupo y Luisa González, cantante y cantaora. Hacen mejor lo caribeño que es lo suyo y lo entienden dominan sin ningún esfuerzo. El flamenco es distinto, aunque es tratado con respeto y un notorio afán de fidelidad. La cantaora tiene buen eco en algunos tercios de los cantes, pero no puede redondear ninguno con solvencia. A veces mete el acelerador y uno se queda casi sin aliento al oírla. Otras divaga a mitad de camino entre el cante y la canción de allá tan agradable y melódica.

Encuentro de son y flamenco

Grupo Raíces. Casa Patas. Madrid, 18 de enero.

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