Crítica:CINE

Otra vez es Navidad

En la primera versión de Mira quién habla, un producto convencional, pero demoledor en taquilla, una mujer soltera quedaba embarazada y le ayudaba en el parto un descarado y hortera taxista, que respondía al chocante apellido de Ubriacco -"borracho", en italiano-. Entre los dos, cara y cruz del éxito social, surgía un amor que daba lugar, en la segunda parte, a un matrimonio como Dios manda. Si en la primera, toda la comicidad del filme recaía sobre los pensamientos del nonato bebé, explicitados en off, en la segunda al crío se le añadía una hermanita. ¿Y en la tercera, que es és...

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En la primera versión de Mira quién habla, un producto convencional, pero demoledor en taquilla, una mujer soltera quedaba embarazada y le ayudaba en el parto un descarado y hortera taxista, que respondía al chocante apellido de Ubriacco -"borracho", en italiano-. Entre los dos, cara y cruz del éxito social, surgía un amor que daba lugar, en la segunda parte, a un matrimonio como Dios manda. Si en la primera, toda la comicidad del filme recaía sobre los pensamientos del nonato bebé, explicitados en off, en la segunda al crío se le añadía una hermanita. ¿Y en la tercera, que es ésta? Bueno, pues como no se trata de hacer de Mrs. Alley una coneja, nada mejor que trasladar la voz y el pensamiento a otro ser animado, en este caso un perro. Y si mejor dos que uno, ¿por qué no hacer que haya una perra que, como Mrs. Alley -con perdón-, esté en la parte alta de la sociedad canina, mientras el macho, como Travolta -igualmente con perdón-, sea un chico de la calle?A partir de estos datos, Mr. Ropelewski construye la tercera parte de Mira quién habla. Que nace, además, con otra intención: convertirse en un filme navideño, de esos que desde que Michael Curtiz firmara en 1954, a mayor gloria de Bing Crosby, Navidades blancas, acostumbran a estrenarse con puntualidad por estas fechas. El resultado es una previsible, blanda, altamente improbable loa a la familia revestida de película navideña para niños, con el gancho añadido de las voces que doblan a los perros (Dianne Keaton y Danny de Vito en la verisón estadounidense, Alfredo Landa y Verónica Forqué en la española) y las propias peripecias de éstos.

Mira quién habla ahora

Director: Tom Ropelewski. Intérpretes: John Travolta, Kristie Alley, Olympia Dukakis, Lysette Anthony. Estreno en Madrid: Vaguada, Real Cinema, Colombia, Albufera, Iviasa, Alcalá, Ideal, Luchana.

Y con John Travolta, el otrora rompecorazones adolescente, convertido ahora en divo para el consumo familiar, un nuevo, actualizado Mr. Blanding que, para nuestro desconsuelo, sólo se parece al gran Cary Grant en que ambos figuran en la cabecera de sus películas. Y en nada más.

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